El Heraldo
Opinión

Yo no olvido el año viejo…

Quiero pensar que el 2020 no fue tan malo. Porque nos enseñó a vivir con limitaciones, a ajustarnos a la realidad.

Un año es el tiempo que toma la Tierra para completar una revolución alrededor del Sol. El planeta recién completó un ciclo más y así los días del 2020 se cumplieron, incluso el adicional de febrero que le convirtió en bisiesto. Al inicio, esa era quizás la única particularidad que veíamos en él, que fuese bisiesto. Y entonces, sin miedo, le dimos la bienvenida con los brazos abiertos a una nueva oportunidad para hacer mejor las cosas y para, llegado el 31 de diciembre, poder decir al son de esa tonada infaltable en la víspera de Año Nuevo “yo no olvido el año viejo, porque me ha dejado cosas muy buenas”.    

Pero el 2020, un año lleno de convulsiones, temores y dolores, dista de ser visto como un buen recuerdo para muchos. Incertidumbre, pandemia, enfermedad, confinamiento y muerte son algunos de los términos que quedarán escritos en cuanta descripción se intente hacer del que, a fin de cuentas, terminó siendo un año indescriptible. Indescriptible desde la forma en la que nos hizo ver lo vulnerables que somos. Indescriptible desde su falta de compasión con nosotros. Indescriptible desde lo fuerte que golpeó a todo el mundo, sin medir género, edad, estatus ni nada.

Pasará el tiempo y nos preguntarán o preguntaremos ¿cómo fue tu 2020?, ¿cómo sobreviviste a ese año?... La claridad que llega con el recuerdo y que nos lleva de vuelta al pasado suele partir de acontecimientos inmensamente felices y placenteros, o de hechos que, por el contrario, sufrimos profundamente, hechos que hacen que aprendamos a ver más allá del temor y del dolor. 

A nivel global, más de un millón de personas murieron a causa de la covid-19; en Colombia, más de 42 mil personas se fueron en 2020 por el mismo mal que aún no se ha ido. Y en 2021, la falta de certezas probablemente continuará, después de un año en el que el coronavirus nos arrebató la tranquilidad a todos los que vimos cómo su letalidad alcanzó a familiares, amigos, vecinos e incluso a personalidades como Armando Manzanero, un músico que con sus composiciones enamoró e hizo enamorar a tantos.

El 2020 fue tan devastador que se llevó consigo a reconocidos personajes como Kobe Bryant, Diego Maradona, Kirk Douglas, Sean Connery, Chadwick Boseman, Quino, Pau Donés, y hasta a Tony Camargo, quien con su voz inmortalizara ‘El año viejo’ que pocos quisieron entonar el último día del año de la peste.    

La palabra peste proviene del latín ‘pestis’, que denota desgracia, calamidad, destrucción. Definir el 2020 con ese término resultaría entonces acertado para muchos, sin embargo, es en la dificultad en donde florece la fuerza. O, al menos, eso es lo que quiero pensar cuando inicia un nuevo año en el que tal vez, por lo pronto, la única novedad sea la modificación del ‘20’ al ‘21’.

Quiero pensar que el 2020 no fue tan malo. Porque nos enseñó a vivir con limitaciones, a ajustarnos a la realidad de los demás que, en cierto modo, es la misma nuestra. A sentir un poco más el dolor ajeno, porque aprendimos la importancia de que otros sintieran el nuestro. Y a tener gratitud por aquello que es tan simple como vital. “Desechad tristezas y melancolías. La vida es amable, tiene pocos días y tan solo ahora la hemos de gozar”, dijo el poeta García Lorca y, con el corazón en la mano, hoy les digo yo.   

@cataredacta    

Facebook
Twitter
Messenger
Whatsapp

Más Columnas de Opinión

El Heraldo
Hugo Illera Jiménez

Junior y la sanción a Jorge Duarte

En los más de cuarenta años que he estado en la industria de los medios de comunicación, el fútbol siempre ha sido la misma historia. Los temas del Junior de Barranquilla, por partidos accidentados y fallos arbitrales, siempre se maximizan y s

Leer
El Heraldo
Hernando Baquero Latorre

A cuidar las marchas

Las marchas y manifestaciones han desempeñado un papel crucial en la dinámica de los cambios sociales a lo largo de la historia. Estos eventos han sido catalizadores potentes para transformaciones sociales y políticas, y van más allá de la le

Leer
El Heraldo
Óscar Borja

¡Lee la naturaleza!

Para quienes compartimos que Dios es el creador del universo y de la vida o para quienes no lo aceptan, lo único claro es que, de todos los seres vivos existentes en la naturaleza, el único que tiene la capacidad de comunicarse con sus semejante

Leer
Ver más Columnas de Opinión
X
COMO REPORTAR A WASAPEA
1. Agrega a tu celular el número de Wasapea a EL HERALDO: +57 310 438 3838
2. Envía tus reportes, denuncias y opiniones a través de textos, fotografías y videos. Recuerda grabar y fotografiar los hechos horizontalmente.
3. EL HERALDO se encargará de hacer seguimiento a la información para luego publicarla en nuestros sitio web.
4. Recuerda que puedes enviarnos un video selfie relatándonos la situación.