Escribir historias de mujeres inspiradoras es todo un honor para mí, es una forma de polinizar el mundo de esperanzas, de reconocer el poder creativo y transformador de las mujeres y la gran LEIQUI sí que tiene relatos que demuestran lo poderosas que somos las mujeres y la generosidad que traemos por naturaleza para poner los talentos al servicio de todos y todas.

Hoy mi espíritu se infla de sororidad porque les voy a compartir la historia de una gladiadora existencial, que ha escogido caminos de determinación, de nunca silenciarse y siempre manifestarse, con argumentos y valentía. Es un honor poderla llamar amiga y aliada, tenerla en mi red de apoyo para llevar a cabo la gran misión feminista, antirracista y social. Leiqui es ejemplo de lealtad y nutre el alma de quienes rodeamos su existencia.

Tiene alma de maestra y referente, quienes la conocemos nos contagiamos con su fuerza y determinación, sus causas han transitado por la política, la enfermería, lo administrativo, lo social, el cine y la cultura. Así cuando llega al cine se dispara su posicionamiento en el mundo, es el referente por el que pasa todo el cine guajiro y especialmente el wayuu, es la maestra de maestras que ha esparcido su talento en las nuevas generaciones, haciendo cine con ética, respeto y transparencia absoluta, no se rinde ante nada ni permite que su cultura sea “saboteada”, habla con contundencia y enseña con carácter, haciendo de su semillero un equipo de resistencia creativa a favor de nuestro territorio guajiro, de esa dama poderosa que es cabeza de Colombia.

Su historia de poder marcada por logros

Leiqui del Carmen Uriana, es Wayuu del clan Sijono. Cineasta egresada del programa de Dirección Documental de la Escuela Internacional de Cine y Televisión de San Antonio de los Baños (EICTV - 2012), Cuba. Tiene experiencia en realización y producción audiovisual.

Ha participado en varias producciones cinematográficas en Venezuela y Colombia desde el 2005. Actualmente es co-productora de largo documental ecuatoriano “El Ocaso de la Amazonia” dirigida por Diego Sarmiento (2023), productora general de las siguientes producciones indígenas: largo documental “Buscando las marcos del Asho’ojushi” de David Hernández Palmar y Marbel Vanegas (2023) el largo documental y “Ako’yolowaa – Cubrirse el alma" (2024) Así mismo es directora de varios documentales, entre esos: Jiikiru’u koo’oikat - La Memoria de la Avispa (2024) actualmente en post producción de: Médico, por la gracias a los espíritus, ambos ganadores del Fondo de Cinematografía de Colombia.

Durante su trayectoria, ha priorizado la formación de otros realizadores indígena, participando en la Escuela de Comunicaciones Wayuu “Jayariyu Farías Montiel” e impulsando el primer Laboratorio de Cine étnico de Colombia “WayuuLab”, realizado en territorio Wayuu (2019-2021), Es directora general de la Productora Anakaa Films y miembro fundador de la Red de comunicaciones Wayuu Putchimaajana.

La transformación con sello de mujer wayuu

La historia de Leiqui tiene sello de mujer wayuu, es tejedora, transformadora, resiliencia y resistente, creativa y disruptiva. Inevitablemente ella es un universo inspirador que nos convoca a seguir en nuestras causas sociales, gracias, maestra Leiqui por su generosidad y su tiempo, por esparcir su sabiduría en el mundo e inmortalizar su legado en documentales, películas y rodajes únicos y auténticos. Que la Guajira y el mundo sigan recibiendo el poder de mujeres indígenas que no arrugan ante nada, que el cine y todos los escenarios tengan equidad e igualdad de derechos y que sean contextos de justicia social.

¡Gracias infinitas por su legado femeninamente transformador!

@facostac