Ustedes me van a disculpar por lo que voy a decir, pero debe decirse en las circunstancias actuales: todo tiempo pasado fue mejor. No es nostalgia, son hechos. Se debe a que teníamos unos hábitos muy saludables dentro de una vida que podía vivirse, lo cual fue cambiando de manera gradual hasta la realidad de nuestro ahora, el peor estilo de vida de los últimos siglos: pésimos hábitos a todos los niveles y una vida muy difícil de ser vivida.
El endocrinólogo Joaquín Armenta Ferreira, presidente de la Fundación Vida Nueva, llamó mi atención para recordarme que el 24 de septiembre se celebra el Día de Lucha contra la Obesidad en Colombia, por ley nacional, y me invitó a vincularme en esta semana del 22 al 29 de septiembre en la Semana para Promover Hábitos y Estilos de Vida Saludable. La idea del 24 y del resto de la semana es concientizar a la comunidad mediante actividades académicas y encuentro con ellos para comprender qué es la obesidad en todas sus dimensiones y promover estilos de vida saludable para disminuir su impacto en nuestras vidas.
La segunda barbaridad es la siguiente: comíamos bien y teníamos un estilo de vida muy tranquilo y algunos hábitos que incluían actividad física mínima. Nuestra alimentación básica incluía una proteína, un carbohidrato y vegetales. Contiene todo lo que un ser humano necesita para estar bien alimentado. Hoy, hasta yo he caído en la tentación de la salchipapa, y con eso digo todo.
Las condiciones sociales, económicas, políticas, sanitarias, de seguridad del ciudadano, cambiaron para peor y vivimos sobre el común denominador del estrés, no nos merecemos esta vida.
La tercera es peor: todas las personas mayores de mi entorno, que crecieron con esta dieta, han sido adultos sanos y longevos. Pongo de ejemplo a Don Joaquín Armenta, padre del médico, quien el 23 cumplió 100 años de edad en unas condiciones especiales a nivel físico y mental, cuya dieta y estilo de vida conozco de fuente directa, a quien llamé para felicitarlo y pedirle la receta de la longevidad, y me contestó jocoso: Y sin bastón y leyendo un libro para ocupar la mente.
Comuníquense con la Fundación Vida Nueva para enterarse de la programación en esta semana en que debemos concientizarnos de todo lo relacionado con la obesidad, sobre todo con estadísticas tan alarmantes como que el 60% de los colombianos, 1 de cada 5, sufren de sobrepeso y obesidad, comprende todos los grupos de edad, es más frecuente en las mujeres. Dadas las proporciones de las cifras, es claro que estamos hablando de un problema de salud pública que debemos afrontar como sociedad desde la prevención.