La cifosis es un padecimiento que se caracteriza por una curvatura anormal de la columna vertebral, dando la impresión de una joroba en el paciente. Este encorvamiento, que puede ser mayor de lo normal, ocasiona problemas significativos como dolor y dificultades respiratorias. En condiciones normales, la curva de la columna oscila entre 20 y 40 grados, permitiendo a los individuos llevar una vida activa y sin restricciones en su capacidad para realizar ejercicios físicos.

Los síntomas de la cifosis son fácilmente reconocibles: la presencia de una espalda encorvada o jorobada, junto con dolor en la zona lumbar. A medida que las personas envejecen, las vértebras tienden a perder flexibilidad, haciendo que la columna se incline hacia adelante. En la adolescencia, se pueden clasificar tres tipos de cifosis: la cifosis congénita, que no es evidente hasta etapas posteriores; la cifosis postural, resultado de hábitos inadecuados que llevan a una adaptación de los músculos y huesos a esta posición; y la enfermedad de Scheuermann, que presenta un importante componente genético.

El diagnóstico de la cifosis implica una evaluación clínica y la obtención de imágenes con proyecciones dinámicas, fundamentales para determinar el tratamiento adecuado. La curvatura normal de una columna sana es crucial para mantener el equilibrio, la postura y la capacidad de estar erguidos. En los primeros pasos del tratamiento, se le proporciona al paciente una serie de indicaciones sobre ejercicios y terapia física, siendo esencial que estos sean realizados de manera constante y disciplinada. Solo en casos donde la curvatura excede los parámetros aceptables se considera la opción quirúrgica.

Un caso notable reportado en el Houston Chronicle el 10 de julio narra la historia de un paciente de 16 años cuya cifosis había progresado a un rango de 60 a 80 grados. Se utilizó el Velys Robot de Johnson & Johnson como herramienta de asistencia durante la cirugía. Con un costo de 1.5 millones de dólares, este robot facilita al cirujano la colocación precisa de la instrumentación necesaria para la fusión vertebral. Antes de la cirugía, se discutieron los riesgos y se informaron a la familia sobre la condición del paciente, quien presentaba huesos particularmente delgados. La precisión en la operación es vital, ya que esto influye en el éxito a largo plazo.

La planificación de la cirugía tomó en cuenta aspectos como el número de tornillos requeridos por vértebra, el sitio de la intervención y el ángulo de inclinación necesario para la inserción de los tornillos. Durante un procedimiento que duró cinco horas, se estableció comunicación continua con el robot, que brindó sugerencias al cirujano sobre cómo calibrar el instrumental.

La cirugía robótica para tratar la cifosis se asocia con una alta precisión en la colocación de implantes, lo que reduce significativamente los riesgos de daño neurológico y pérdida de sangre. Además, esta técnica conlleva menos agresión quirúrgica, menor dolor y tiempos de recuperación más breves. La planificación se realiza utilizando imágenes tridimensionales de la columna del paciente, mientras que el sistema robótico funciona bajo la dirección del cirujano, alcanzando una precisión del 99.5%, lo que minimiza la probabilidad de error.

A pesar de estos avances, la situación fiscal del sistema de salud en Colombia enfrenta serias dificultades, con un déficit estimado de 32 billones de pesos según la Contraloría. Esta crisis afecta la red asistencial, el pago al personal médico y el acceso a insumos médicos. La adquisición de tecnología avanzada como la cirugía robótica es limitada para la gran mayoría de las instituciones en el país, dado que el costo estimado de una cirugía de cifosis robótica podría ascender a 100 millones de pesos. Tan simple: pequeñas incisiones en la espalda, introducción del brazo robótico equipado con un pequeño gancho y control de los movimientos desde una consola independiente. Esta proporciona una visión en 3D de la columna vertebral y el cirujano puede dirigir los movimientos del brazo robótico con total control. En nuestro país: tan distante.

@Rembertoburgose