¿Qué hace un Senador? Nada, dicen muchas personas porque no conocen cómo funciona el Estado, nunca han leído la Constitución Política, se nutren de la información que disparan las redes sociales o del bochinche callejero. Otros, le siguen la corriente a unos políticos que tienen un discurso de ataque permanente contra las instituciones mientras están por fuera de la rosca. Pero, como todo en este mundo, hay Senadores buenos que se ganan lo que trabajan, mientras que otros no producen nada. Nunca hacen un debate sobre los graves problemas que tiene el país, ni tampoco han presentado un proyecto de ley así sea sobre la fundación de un municipio para reclamar más apoyo del gobierno nacional.
Hay Senadores con una excelente productividad parlamentaria. En cambio, hay muchos a quienes no se les conoce su voz, ni un proyecto de ley. Solamente cumplen con el horario para cobrar su sueldo. Entonces, ¿qué puede hacer un Senador?
1. Puede citar a un debate, desde un Ministro hasta el más humilde funcionario público. Lo faculta el artículo 135.8 de la Constitución Política.
2. Puede proponer moción de censura contra Ministros, Superintendentes y Directores de departamentos administrativos, por asuntos relacionados con sus funciones. Lo faculta el artículo 135.9 de la norma anterior.
3. Puede expedir, reformar y derogar leyes, códigos, conceder facultades al gobierno nacional sobre contratos y empréstitos y todas las demás actividades señaladas en el artículo 150 superior, mediante proyectos de ley.
4. Según el artículo 173 de la citada norma, puede aprobar o improbar los ascensos militares, autorizar al gobierno para declarar la guerra a otra Nación, elegir a los magistrados de la Corte Constitucional y al Procurador General de la Nación.
5. Según lo indicado en los artículos 174 y 175 superior, el Senado conoce de las acusaciones que formule la Cámara de Representantes contra el Presidente de la República o quien haga sus veces. Ahora bien, a este artículo le falta un pedazo grande, pues no se sabe de qué país, pues dicha Comisión Legal de Investigación y Acusaciones de la Cámara de Representantes, desde su inicio, no se le conoce ninguna sentencia condenatoria.
Todo lo que puede hacer y no hacer, está reglado. No arreglado, pues si se tuerce puede terminar en el lugar equivocado, como los dos personajes de esta semana, “como asistiendo a su propio entierro, caminando entre un grupo de amigos vestidos de luto solemne, pero con un ánimo de fiesta”, como escribió García Márquez en sus Doce cuentos peregrinos.