Se trata de Rafael Mejía, Alejandro Durán, Óscar Bocanegra, Harold Pérez y Antonio Tobías.
La inhumación fue realizada en el cementerio del municipio de Manaure, Cesar.
La Unidad de Búsqueda de Personas Desaparecidas inició la intervención del Cementerio Calancala de Barranquilla, al catalogarlo como “un lugar de interés forense”. Se estima que allí reposan restos de al menos 1.200 personas de toda la región Caribe, muchas de estas muertas desde finales de los años 90 hasta el 2005, tiempo en el que se generó un aumento significativo en el número de desapariciones, principalmente asociadas al paramilitarismo y a las guerrillas.
La estrategia consiste en una plataforma en línea con la información de las personas desaparecidas que aún no han sido reclamadas. Por el momento son 63, pero podrían aumentar hasta 7.000, según informó la directora de la UBPD, Luz Forero.
Con su nueva sede en el Magdalena, la Unidad de Búsqueda amplía su oferta institucional en la Costa Caribe.