Los beneficiados fueron los habitantes del barrio Etnia Wayuu, en Uribia, La Guajira.
La meta es restaurar un total de 260 hectáreas con la siembra de árboles como Caracolí, Guaimaro y Cedro, entre otros.
Entre otros temas, está por resolverse el caso de los cinco hermanos de la comunidad que murieron en circunstancias que aún no son claras.
Antes de ser llevados al cepo los hombres fueron agredidos por algunos pobladores y paseados, a pie descalzo, por sus calles.
En esta fecha, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) busca reivindicar los derechos de esta comunidad en el mundo.