El reto ahora no es solo construir, sino sostener. Que la Luna del Río encuentre su público, su ritmo y su lugar en la ciudad. Porque un verdadero símbolo urbano no se mide por su altura, sino por su permanencia y por la capacidad de seguir girando cuando ya pasó la novedad.
Hablar de Carlos Yacamán es hablar de un amigo, de un hermano, de un personaje único y original, valioso y fuera de serie. Un ejemplo para las actuales y futuras generaciones, un hombre correcto en sus negocios y coherente en su manera de vivir.
Colombia necesita sincerar esta conversación. El salario mínimo no puede seguir operando como un “interruptor maestro” que activa cargas ocultas en todo el sistema. La desindexación debe completarse, aunque para esto se requiere la bendición de un congreso que le pagan en múltiplos de salario mínimo.
Procuraré describir lo que allá aprecié y que sería posible implementar aquí. Lo básico sería reconstruir las calzadas y los andenes actualizando sus anchos para una óptima utilización de los espacios para vehículos y peatones. Nada de adoquines en las aceras sino concreto liso.
‘Yo soy Cabal’, un libro que recoge la historia de la vida y las ideas de una mujer que no promete…, que se compromete con Colombia.