Ciudad del Vaticano. El papa Francisco calificó ayer de 'escándalo' que exista el hambre y la malnutrición en el mundo y criticó 'el consumismo, el desperdicio y el despilfarro de alimento' en un mensaje enviado al director de la FAO, José Graziano da Silva, en ocasión de la Jornada Mundial de la Alimentación.
En su mensaje, que fue leído ayer durante la celebración de esta jornada en la sede, en Roma, de la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y Agricultura (FAO), el papa consideró que uno 'de los desafíos más serios para la humanidad es el de la trágica condición en la que viven todavía millones de personas hambrientas y malnutridas, entre ellas muchos niños'.
El papa Jorge Mario Bergoglio instó a todas las partes de la sociedad a 'afrontar juntos' este problema 'para lograr una solución justa y duradera' y para que 'nadie se vea obligado a abandonar su tierra y su propio entorno cultural por la falta de los medios esenciales de subsistencia'.
Bergoglio hizo notar la paradoja de cómo la globalización permite conocer las situaciones de necesidad de las personas en todo el mundo, pero sin embargo 'crece la tendencia al individualismo' y a 'la indiferencia tanto a nivel personal como de las instituciones y de los estados, respecto a quien muere de hambre o padece malnutrición'.
'El hambre y la desnutrición nunca pueden ser consideradas un hecho normal al que hay que acostumbrarse, como si formara parte del sistema. Algo tiene que cambiar en nosotros mismos, en nuestra mentalidad, en nuestras sociedades', insto el pontífice. Efe





















