Compartir:

Rusos y ucranianos ya celebraron entre febrero y abril de 2022, poco después del inicio de la guerra, negociaciones para poner fin al conflicto. Con todo, esas conversaciones fueron fallidas, ya que Kiev se negó a aceptar las demandas del Kremlin, al considerarlas una capitulación.

Leer más: Comienza el primer encuentro entre Rusia y Ucrania buscando una salida a la guerra

Los presidentes de Rusia, Vladímir Putin, y Ucrania, Volodímir Zelenski, no se reúnen desde diciembre de 2019 en París, cuando se vieron con mediación de Francia y Alemania.

 Tira y afloja tras la invasión

Previamente a la reunión en Estambul, ambos bandos celebraron cinco rondas de contactos en territorio de Bielorrusia, en la frontera ucraniano-bielorrusa y en la ciudad turca de Antalya.

La primera reunión tuvo lugar el 28 de febrero de 2022 en la región bielorrusa de Gómel, pero no hubo acuerdo sobre treguas humanitarias. La segunda ronda celebrada el 3 de marzo tuvo como resultado la declaración de breves altos el fuego en algunas zonas del frente con el fin de crear corredores para evacuar civiles.

No olvide leer: Noboa amplía su “guerra” al crimen organizado en Ecuador a grupos disidentes de las FARC

Los ministros de Exteriores de Rusia y Ucrania, Serguéi Lavrov y Dmitro Kuleba, se reunieron por primera vez el 10 de marzo en Antalya. Las conversaciones duraron dos horas sin que hubiera acuerdo sobre el cese de los bombardeos aéreos sobre el puerto de Mariúpol.

Seguidamente, el presidente ruso se mostró dispuesto a reunirse con el líder ucraniano, aunque sólo si era para llegar a un acuerdo.

En vísperas de la primera ronda de negociaciones en Estambul, el negociador jefe ruso, Vladímir Medinski, advierte a Ucrania de que tanto el estatus de la anexionada península de Crimea como de las repúblicas populares de Donetsk y Lugansk, cuya independencia fue reconocida por el Kremlin, son intocables para Rusia.

Lea también: Ethel Caterham, la persona más longeva del mundo, reveló cómo logró llegar a los 115 años

 Estambul-1

El 29 de marzo de 2022 el Palacio de Dolmabahçe de Estambul acogió las negociaciones presenciales entre las delegaciones rusa y ucraniana.

Con el fin de allanar el camino para un acuerdo, Putin anunció el repliegue de las tropas rusas que se encontraban al norte de Kiev, lo que el Kremlin llamó “un gesto de buena voluntad”, algo que Ucrania consideró una derrota en toda regla de Moscú.

Lea acá: Atropellamiento masivo en Barcelona deja varias personas levemente heridas

Lavrov calificó al día siguiente las negociaciones como un “avance positivo” y, en particular, consideró un “progreso significativo” que los negociadores ucranianos confirmaran “la necesidad de garantizar un estatus no nuclear y al margen de bloques de Ucrania, y su seguridad fuera de los marcos de la Alianza Atlántica”.

“Por vez primera en muchos años, las autoridades de Kiev expresaron su voluntad de llegar a un acuerdo con Rusia”, añadió Medinski.

Al respecto, Zelenski también calificó de “positivas” las negociaciones, pero subrayó que “no puede haber ni habrá ningún compromiso sobre la soberanía e integridad territorial” de Ucrania.

Le puede interesar: La advertencia de Estados Unidos a Colombia por acuerdo con China para adherirse a la Nueva Ruta de la Seda

Entre otras cosas, Kiev propuso a Moscú un plazo de quince años para negociar el estatus de Crimea, anexionada por Rusia en 2014.

En las siguientes rondas celebradas en abril por videoconferencia rusos y ucranianos acordaron que Ucrania, a cambio de garantías de seguridad de los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU, aceptaría ser un país neutral, al margen de bloques y sin armas nucleares.

 Ucrania se niega a capitular tras Bucha

No obstante, las negociaciones encallaron cuando, al parecer, Rusia presentó nuevas demandas y Kiev denunció matanzas de civiles a manos de soldados rusos en la localidad de Bucha.

Lea también: Pareja abusó sexualmente a una joven y la encerró en una jaula para perros por años: así pudo escapar

Según los biógrafos de Zelenski, éste decidió rechazar las demandas rusas tras visitar esa localidad al norte de Kiev, aunque el jefe negociador ucraniano, David Arajamia, aseguró que fue el primer ministro británico, Boris Jonhson, quien le habría conminado a hacerlo.

Según se supo después, Rusia exigió finalmente en Estambul la práctica capitulación de Ucrania, ya que demandaba reducir el tamaño de su Ejército hasta los 85.000 efectivos; renunciar a ingresar en la OTAN; reconocer la anexión de la península de Crimea y conceder el estatus oficial a la lengua rusa.

A cambio, Kiev recibiría garantías de seguridad internacionales, mientras el futuro del Donbás lo abordarían ambos presidentes en negociaciones bilaterales.

En septiembre de ese año Putin promulgaría la anexión de cuatro regiones ucranianas -Donetsk, Lugansk, Jersón y Zaporiyia-, que ahora Moscú considera parte inalienable de su territorio.

Lea aquí: Colombia, beneficiada con millonaria financiación de la Unión Europea destinada a ayuda humanitaria

Putin propuso el pasado 11 de mayo “reanudar” este jueves las negociaciones directas con Ucrania, al que acusó de abandonarlas unilateralmente en 2022.

En estos tres años, el ejército ucraniano ha logrado liberar el 50 % del territorio bajo control ruso al comienzo de la campaña militar, aunque los rusos siguen controlando casi el 20 % del país vecino.