A finales del mes pasado fue dado a conocer por el Departamento Administrativo Nacional de Estadística, Dane, que la ciudad de Barranquilla, para el período febrero-abril 2011, fue la ciudad con la menor tasa de desempleo dentro de las 13 principales ciudades del país, con un 8,2%, reportando una disminución de 0,3 puntos porcentuales frente a la de similar período 2010.
No obstante, la Fundación para el Desarrollo del Caribe, Fundesarrollo, en su informe mensual sobre los principales indicadores de la actividad económica de la ciudad, advierte que esta cifra debe analizarse con mucha cautela, pues esconde amplias debilidades de nuestro mercado laboral que a simple vista pueden darnos una interpretación errada de la realidad.
La entidad señaló que es necesario tener en cuenta que los buenos resultados laborales en Barranquilla están estrechamente ligados a que la ciudad continúa presentando una tasa de participación muy baja, esto es, la tercera más baja entre las trece mayores áreas metropolitanas, lo que viene acompañado de un incremento en el subempleo, tanto objetivo como subjetivo.
Lo anterior, en otros términos, significa que aunque en apariencia los resultados sean satisfactorios, esto se debe más a la simplicidad de la fórmula para medir el desempleo que a mejoras sustanciales en las condiciones de trabajo, pues que tengamos una baja tasa de participación quiere decir que simplemente contamos con una gran cantidad de personas laboralmente inactivas, esto es, personas como estudiantes, amas de casa, jubilados, pensionados, incapacitados o que simplemente declararon que dejaron de buscar empleo en los últimos doce meses porque se han desanimado.
Para el caso de Barranquilla el informe reveló que la mayor parte de este grupo lo constituyen las personas dedicadas a las labores del hogar (45.1%) , mientras en el resto de ciudades de país este grupo lo conforma mayoritariamente estudiantes.
De igual forma, el incremento del subempleo no significa otra cosa a que un mayor porcentaje de los que actualmente se encuentran empleados manifiestan que se desempeñan en funciones que no son aptas para su nivel de formación, que sus ingresos no son suficientes, o que no trabajan el número de horas que están dispuestos y aptos para trabajar.
Si el subempleo es subjetivo, el empleado simplemente ha manifestado su inconformismo con su situación laboral actual, pero cuando el empleado además ha hecho gestiones para mejorar su situación, se considera que el subempleo es objetivo.
Por otra parte, Fundesarrollo, al analizar la distribución del empleo en Barranquilla según tipo de ocupación, encontró que el mayor porcentaje continúa desempeñándose por cuenta propia (47.6%), seguido por el empleado particular con el 37.4%; sin embargo, cabe mencionar que mientras la primera categoría ocupacional disminuyó en 0.8%, la segunda aumentó en 5.2%.
Finalmente, uno de los hechos más preocupantes en materia de empleo es la gran pérdida presentada en la industria manufacturera, la cual reportó la mayor caída en el personal ocupado con una alarmante cifra de 11.963 empleos menos en comparación con el año anterior.
Empleo por sectores
En cuanto a la ocupación laboral según sectores económicos, Comercio-Hoteles-Restaurante continúa siendo el más empleador, absorbiendo en el trimestre febrero-abril de 2011 el 33% del número total de ocupados, seguido por Servicios Comunales-Sociales-Personales, con el 20.9%, y la industria manufacturera, con el 16.5%.
Así mismo, al comparar el período analizado para el año 2011 con su similar del año 2010, Comercio-Hoteles-Restaurante fue la actividad económica en la que se generó un mayor número de empleos (18.839), es decir, el 73.2% de los nuevos empleos, lo cuales sumaron 25.721. Por el contrario, en la industria manufactura se reportó la mayor caída en materia de personal ocupado (11.963 empleos menos).
Por Cristina Albor Cepeda
