Colombia tiene un potencial enorme por aprovechar en el comercio exterior, apostando por una oferta con valor agregado que no dependa del vaivén de los precios internacionales de las materias primas, y por la diversificación de mercados.
Nuestro objetivo de fortalecer el comercio regional, liderado por el Ministerio de Comercio, Industria y Turismo, es el correcto. Organismos como la Cepal (Comisión Económica para América Latina y el Caribe) y el BID (Banco Interamericano de Desarrollo) han publicado estudios recientes que enfatizan en la importancia y el potencial de crecimiento del comercio intrarregional, el cual incrementó en las exportaciones entre sus países entre 22% y 25% en 2022, según estas entidades.
Para seguir por esa senda tuvimos esta semana la Macrorrueda de Negocios de las Regiones en el Centro de Eventos Puerta de Oro.
Estamos facilitando los espacios y las herramientas necesarias para que más empresas colombianas crezcan mediante la internacionalización, llevando justicia económica a todos los territorios. Ese es el espíritu de esta macrorrueda que denominamos de las regiones, porque es de todos los colombianos.
Fueron 618 empresas compradoras de 44 países, especialmente de Latinoamérica y el Caribe, y 1.436 exportadoras colombianas de 24 departamentos. Y tuvimos la participación de Nariño y Venezuela como invitados especiales, una decisión que busca dinamizar las prácticas de internacionalización de nuestro país y fortalecer la relación económica en diversos sectores.
Nos hemos trazado cinco pilares para dinamizar las ventas no mineras en el exterior del país: promoción de exportación de las mipymes; más territorios contribuyendo a las exportaciones no minero energéticas (con especial foco en zonas Pdet y municipios de menos de 200.000 habitantes); más ventas hacia Latinoamérica y el Caribe; más bienes y servicios con valor agregado hacia el exterior, y apoyo a unidades económicas de población diferencial como etnias, mujeres, jóvenes, LGBTIQ+, indígenas y reinsertados.
La invitación es al tejido empresarial de Atlántico para que trabajemos articuladamente con el fin de avanzar en esa Política de Industrialización presente en el Plan de Desarrollo Nacional, liderada por el ministro Umaña, y que las empresas se vinculen con mayor énfasis en cadenas de valor de escala mundial, en especial en Latinoamérica y el Caribe, adaptando tecnología e incorporando desarrollo técnico, sobre todo para las micro, medianas y pequeñas empresas, junto con su capacidad humana.