Una palabra y una frase
Pero en todas las facetas humanas esos líderes de todas las escalas en cambio cada día buscan afilar, mejorar, fortalecer las palabras del odio, de la venganza, de la violencia. Ya no conocemos otro idioma y cada día cuanta falta nos está haciendo darle las "Gracias" a quien te tiende la mano, con una sonrisa pedirle "Por favor" al vecino que te ayude a cruzar la calle.
Quienes sostenemos una columna de opinión con frecuencia nos encasillamos en los temas relacionados con el diario vivir. Es lo lógico, a no ser que formemos parte de ese maravilloso mundo de intelectualidad selecta, artistas, genios de las ciencias, la academia, el arte, la literatura inclusive con sus maravillosos matices, todo ello que logra apartar al escritor de ese mundano espacio de los cotidiano con el cual hay que lidiar día a día, dentro del denso concepto de las tristes realidades humanas hoy como siempre sofocadas de las pasiones negativas, los odios, los crímenes, la violencia en sus múltiples manifestaciones, lo que hoy en día es, desafortunadamente, ese trajinar diario donde hay menos paz y más guerras, menos perdón y más angustias, menos compasión y más venganza.
Es por eso que se nos olvida a quienes escribimos y a quienes no lo hacen pero si nos leen, que hay otro lado de la vida que esta allí quietecito esperando que lo utilicemos porque es ese rincón donde fluye los sentimientos. Es que al mundo, a Colombia, se le olvidaron los sentimientos que es la parte límbica de las emociones, que es el interior de los corazones, la ausencia de lo feo y de lo malo. Es ese rincón escondido que todos tenemos y lo guardamos como lo mejor pero no lo utilizamos como debe ser. Teniendo a la mano el instrumento más ponderado, más sabio, más útil y quizás más bello que nos haya regalado la naturaleza: La palabra. Y dentro de ese concepto el idioma, el lenguaje, formado a través de la evolución del hombre en la civilización pero su más fabulosa arma para poder expresarse, manifestarse, ofrecerse, cohabitar.
Nosotros tenemos en el español un idioma hermoso y rico en significados. Es un idioma cada día más repleto de simbolismos, de estructuras, de lingüística que nos ofrece mejores y lujosos rincones para la espiritualidad. Y no lo aprovechamos porque estamos pendientes de expresarnos, comunicarnos, a través de la controversia, la distancia, lo negativo. Por ejemplo hay palabras en el español que se nos están olvidando. Ya casi no escuchamos ni en privado ni en público que alguien nos diga "Gracias" o que se nos solicite "por favor", para algo que requieran. Obsérvenlo, amables lectores con detenimiento hagan un repaso elemental y casi esta frase y estas palabras ya no se usan. Ahora todo se da por hecho, todo por descontado, porque hasta dialogar se nos está olvidando. El diálogo lo está reemplazando el vicio solitario de la virtualidad donde tu conversas contigo mismo y a ti mismo es difícil que le pidas un "Por favor".
Pero al mismo tiempo cuanta falta le hace al mundo esta frase y esta palabra. A Colombia ni se diga. Nuestros líderes se les olvidó decir "Gracias" y les ofende sentirse disminuidos si se rebajan a un "por Favor”
Pero en todas las facetas humanas esos líderes de todas las escalas en cambio cada día buscan afilar, mejorar, fortalecer las palabras del odio, de la venganza, de la violencia. Ya no conocemos otro idioma y cada día cuanta falta nos está haciendo darle las "Gracias" a quien te tiende la mano, con una sonrisa pedirle "Por favor" al vecino que te ayude a cruzar la calle. Ese mundo cada día más lejano de acercamientos hasta con una sonrisa se acabó en nuestro país, que lástima, porque bastante falta nos hace recordar, que todavía tenemos sentimientos, bondades que dar, perdones que otorgar. Ojalá las Iglesias todas, no se les olvide insistir con terquedad en esta predica tan importante. Todavía en el hombre allá bien escondido tiene su corazoncito.
Más Columnas de Opinión
Junior y la sanción a Jorge Duarte
En los más de cuarenta años que he estado en la industria de los medios de comunicación, el fútbol siempre ha sido la misma historia. Los temas del Junior de Barranquilla, por partidos accidentados y fallos arbitrales, siempre se maximizan y s
La pobreza energética, un mamotreto de tareas
De Mamotreto, del latín mammothreptus, cuyo significado literal es criado por su abuela, deriva “abultado o gordito”, por la creencia de que las abuelas crían niños gordos. Hoy tiene tres usos: armatoste (objeto grande), libro o l
A cuidar las marchas
Las marchas y manifestaciones han desempeñado un papel crucial en la dinámica de los cambios sociales a lo largo de la historia. Estos eventos han sido catalizadores potentes para transformaciones sociales y políticas, y van más allá de la le
¡Lee la naturaleza!
Para quienes compartimos que Dios es el creador del universo y de la vida o para quienes no lo aceptan, lo único claro es que, de todos los seres vivos existentes en la naturaleza, el único que tiene la capacidad de comunicarse con sus semejante