La prestigiosa revista Time designó a los arquitectos de la Inteligencia Artificial como el personaje del año 2025 por su magnitud del impacto en la economía, la política y la vida cotidiana a nivel global y por ser el motor de la revolución digital, aspecto que no tiene discusión alguna. Sin embargo, los efectos negativos generan preocupación mundial en el desempleo, la salud mental del trabajador, el incremento del suicidio de jóvenes sin futuro, el aumento de locos y locas en los pueblos, la drogadicción y la inseguridad sin límite, el descalabro de la educación tradicional y el peligro de un robot manejando el poder político del planeta.
En efecto, la periodista Karen Hao autora del libro El imperio de la IA señala lo siguiente: “Las empresas líderes en IA, como OpenAI, no son meras startups, sino nuevos imperios que operan a escala planetaria. Estos imperios compiten por monopolizar el conocimiento humano, un recurso mucho más valioso que el petróleo, controlando recursos clave y buscando mano de obra barata globalmente”.
Un desempleo del 20% mundial no es una preocupante cifra estadística, sino el descalabro laboral del mundo productivo, especialmente sobre las 40 profesiones de trabajos operativos, administrativos, medios de comunicación, educación y formación, finanzas, tecnología, ciencia de datos y ciencias sociales, afectados por la IA. El incremento del desempleo de un 1% equivale en Colombia a 400.000 desempleados.
Vale aclarar que lo que estos cinco locos han inventado es un dragón de dos bocas: una escupiendo oro en abundancia para unos pocos, capaces de descifrar los algoritmos secretos, y otra expulsando excremento humano para el pueblo raso, aturdido de alegría colectiva. Sin embargo, como dijo García Márquez en su libro El otoño del patriarca, “el día que la mierda tenga algún valor los pobres nacerán sin culo”.
La IA sería una bendición de Dios cuando genere los siguientes beneficios: i)Reducción de la pobreza sobre la tierra. ii)Eliminar la gripe y el covid en el mundo para acabar con el negocio de las farmacéuticas, iii)Sintonizar e interpretar el lenguaje de los animales para entender mejor el comportamiento humano, y iv)Modernizar el examen de próstata para evadir el descomunal dedo del Dr. Julito en Macondo que goza con las muecas de sus pacientes.
La Inteligencia Artificial es un embeleco y una trampa de unos avivatos para engañar incautos, pues como dice Jairo Paternina en la canción Plegaria Vallenata: ¿No te das cuenta que el rico es feliz mirando al pobre sufrir?
@FcuelloDuarte








