El Gran Viaje de tu Vida es una película de fantasía romántica dirigida por Kogonada, que narra la historia de dos desconocidos, Sarah (Margot Robbie) y David (Colin Farrell), quienes se conocen en una boda y, poco después, emprenden un viaje extraordinario donde reviven momentos clave de sus vidas pasadas. Esta travesía, que mezcla lo fantástico con lo emocional, les ofrece la oportunidad de comprender su presente y, quizá, reescribir su futuro.

El guion, escrito por Seth Reiss, parte de una premisa intrigante que seguramente resonará con los deseos más íntimos de muchos espectadores: ¿y si pudiéramos repasar nuestras decisiones más importantes y elegir distinto?

Todo comienza en una singular agencia de alquiler de autos, donde dos excéntricos empleados (Kevin Kline y Phoebe Waller-Bridge) les dan la bienvenida y los preparan para el viaje. A bordo de un vehículo guiado por un misterioso GPS, Sarah y David se embarcan en un recorrido que los llevará a revivir experiencias pasadas con la posibilidad de intervenir en ellas.

Ambos personajes llegan a este punto marcados por el desencanto amoroso. Han perdido la fe en las relaciones profundas, y parecen haberse resignado a la soledad. David, más idealista y vulnerable, contrasta con Sarah, una mujer reservada y desconfiada, que evita involucrarse emocionalmente por temor al fracaso. A medida que avanza el recorrido, se ven forzados a enfrentarse a sus propias heridas y elecciones, abriendo la puerta a una posible conexión más sincera.

La película comienza alejándose de la típica comedia romántica, con un tono más contemplativo y una atmósfera que sugiere una historia diferente. Sin embargo, con el paso del tiempo, se desliza hacia lugares comunes y acaba cediendo al sentimentalismo, perdiendo parte de la fuerza emocional que parecía prometer.

A nivel técnico, la fotografía y la música logran acompañar de manera efectiva el viaje emocional de los protagonistas, y las actuaciones de Robbie y Farrell son sólidas y creíbles. Sin embargo, el guion no profundiza lo suficiente en los dilemas que plantea, dejando escapar la oportunidad de una reflexión más compleja sobre la memoria, el arrepentimiento y la posibilidad de cambio.

Comparada con los trabajos anteriores de Kogonada —como Columbus (2017) y After Yang (2021)—, esta producción se queda corta. La sensibilidad visual del director, su uso poético del silencio y su capacidad para explorar emociones profundas están presentes de forma más tenue y menos efectiva aquí.

El Gran Viaje de tu Vida plantea ideas interesantes sobre el amor, el tiempo y las segundas oportunidades, pero termina siendo una película que no alcanza todo lo que sugiere.

@GiselaSavdie