Son numerosos los extensos bosques urbanos que funcionan cuales verdaderos pulmones verdes que aportan innumerables ventajas a las ciudades que los albergan y sirven de reguladores para sus altas temperaturas como lo es la de Barranquilla, estos son claves para la recreación, el esparcimiento familiar y para promover el turismo, dotándolos con atractivos senderos peatonales, ciclo-rutas, aulas ambientales, áreas de parqueo, puntos de ventas de snacks y alimentos saludables, etc. Algunos de estos extensos bosques urbanos, ofrecen lagunas y arroyos cristalinos internos, ya sean naturales o artificiales, profusa señalización de orientación e información didáctica acerca de las especies de fauna y flora que allí habitan.

Son internacionalmente reconocidos parques urbanos como el “Central Park” de New York, quizás el más famoso con sus 320 hectáreas, el “Stanley Park” de Vancouver con 400 hectáreas, el “Gorki” de Moscú con 120 Ha., en Latinoamérica, el “Bosque Chapultepec” en Ciudad de México con 686 Ha., el “Parque Metropolitano” de Santiago de Chile con 737 Ha., el “Parque 3 de Febrero” de Buenos Aires, con 370 Ha., el “Bicentenario” de Quito, parque con 103 hectáreas, el “Parque Samanes” de Guayaquil con 851 Ha., y a nivel nacional, en Bogotá el “Parque Simón Bolívar” con 113 hectáreas; con 107 hectáreas el “Parque Cerro El Volador” de Medellín, el de Cali con 100 hectáreas fue bautizado como “Parque de la Biodiversidad COP16”. Esta relación anterior es para analizar las extensiones de bosques urbanos incluyendo ciudades colombianas.

Hoy en Barranquilla se están terminando las obras civiles y adecuaciones del nuevo “Bosque Urbano Miramar”, BUM, constituido en gran parte sobre terreno no apto para edificar, que con algo más de 20 hectáreas ha sido y seguirá siendo un pulmón en ese sector de la ciudad, y otros dos serían en el barrio La Victoria, el “Jardín Botánico” con 5,4 hectáreas y el “Sagrado Corazón” con 2,1 Ha. Así que aunque nuestra ciudad cuenta hoy con más de 300 parques, se trata de áreas relativamente pequeñas que cumplen un importantísimo papel para la diversión y convivencia ciudadana, mostrar una ciudad más amable, mejorar entornos, valorizar propiedades, etc., pero no pueden considerarse verdaderos pulmones verdes para nuestra calurosa Barranquilla.

No existe en la ciudad un mejor sitio para organizar el más bello bosque urbano que el actual bosque de 75 hectáreas en los predios de Argos comprendidos desde la urbanización “Ciudad Mallorquín” para unirse con las 600 Ha. de manglares del actual Eco-Parque, lo que podría convertirse en el “Gran Parque Argos-Mallorquín” de unas 675 hectáreas, al pie de la ciénaga de su nombre. Sería un bellísimo y noble regalo de Argos a Barranquilla, ciudad que le ha dado tanto a esa empresa.

@nicorenowitzky