Alerta por el incremento del nivel del Embalse del Guájaro
Habitantes de La Peña y Aguada de Pablo expresaron preocupación debido a que continúa la temporada de lluvias. Gobernación adelanta acciones preventivas.
Debido a las fuertes lluvias presentadas en el departamento durante los últimos días, el nivel de las aguas en el Embalse del Guájaro está en ascenso.
El fenómeno está representando un “riesgo inminente” en el sur del Atlántico, principalmente, en los municipios de Manatí, Sabanalarga y Repelón, debido a que están ubicados en zonas aledañas y podrían verse directamente afectados en caso de un desbordamiento del cuerpo de agua.
Las comunidades ribereñas del corregimiento de La Peña, en Sabanalarga, manifestaron que sienten preocupación debido al riesgo que representa este fenómeno.
“Nosotros estamos a la orilla del embalse y ya empezamos a prepararnos para lo que pueda pasar. Durante los tiempos de lluvia, estamos expuestos a las inundaciones. Es una amenaza constante”, afirmó Georgín Páez, residente del barrio La Playita, en La Peña.
De acuerdo con Orlín Martínez, empleado del sector turístico en La Peña, los dueños de establecimientos comerciales ubicados en el malecón están a la espera de que se implementen acciones preventivas ante el riesgo.
El ciudadano reiteró que este sector “sería el primero en inundarse” ante una eventual emergencia.
La situación es similar en el corregimiento de Aguada de Pablo, también en Sabanalarga, debido a que las comunidades se han establecido a la orilla de la ciénaga. Por ende, en caso de inundación, gran parte de la zona estaría afectada.
“Hemos notado que el nivel del embalse ha subido y es un peligro porque nuestros barrios están muy cerca”, ratificó Darly Vargas, habitante de la zona ribereña del corregimiento.
Identificación del riesgo
La alerta temprana motivó a la Gobernación del Atlántico a desarrollar acciones de prevención de riesgo, con el propósito de atender la situación actual en el embalse.
Desde esta entidad se llevó a cabo un recorrido por los corregimientos de La Peña y Aguada de Pablo, por ser estas comunidades que podrían las sufrir mayores afectaciones.
De acuerdo con Candelaria Hernández, subsecretaria de Prevención y Atención de Desastres de la Gobernación, se estarán implementando acciones en estas zonas del departamento en coordinación con las administraciones municipales de Sabanalarga y Manatí.
La Corporación Autónoma Regional del Atlántico (CRA) también ha estado realizando acompañamiento a estos sectores desde la identificación del riesgo.
Según una modelación ejecutada por la mencionada entidad –apoyada en reportes del Ideam– se estima que en estos sectores podrían presentarse incrementos en el cuerpo de agua hasta de 5.5 metros sobre el nivel del mar.
Acciones
En primera instancia, la Alcaldía de Sabanalarga –en conjunto con el equipo de la Defensa Civil– dará inicio a un censo de viviendas aledañas al embalse y que podrían ser vulnerables ante un eventual desbordamiento e inundación.
Posterior al censo, desde la Subsecretaría de Vías y Construcción del departamento, se planea ubicar cerca de siete mil sacos rellenos de material seleccionado en unas bocacalles de esos sectores.
El subsecretario de Vías y Construcción, José Luis García, afirmó que también “se alquilarán motobombas, con el fin de instalarlas en estas zonas del sur del Atlántico”.
Del mismo modo, las secretarías departamentales de Infraestructuras e Interior mantienen inspección en los canales de drenaje que llegan directamente al casco urbano de los municipios de Manatí y Sabanalarga.
