Jairo González Cepeda y Maribel Cabarcas Gómez unieron sus vidas el 9 de diciembre de 1983 en la Iglesia de las Mercedes; Blanca Mónica Domínguez y Andrés Felipe Pérez Gutiérrez de Piñeres lo hicieron el 30 de diciembre de hace cuatro años, mientras que Alfredo Renato Vicentini Mendoza y Lizeth Paola Barrera Sánchez tienen previsto hacerlo el 6 de este mes en la Iglesia Inmaculada Concepción.
Estas tres parejas, todas de diferentes edades, reflejan la preferencia de los colombianos por contraer matrimonio en el mes de diciembre.
Blanca y Andrés, en diciembre de 2010.
Mientras que de enero a noviembre de 2012 el promedio nacional de matrimonios fue de unos 5.300 al mes, en el último mes del año la cifra aumentó hasta los 9.508, de los cuales 937 ocurrieron en el Atlántico. Igualmente, a lo largo del año pasado el promedio fue de 5.100 mensuales en el país, mientras que en diciembre hubo 8.749, 827 de ellos en nuestro departamento, según cifras de la Superintendencia de Notariado y Registro.
Las razones de los novios. 'Fue por tradición familiar. Ya habíamos considerado casarnos y elegimos esa fecha porque fue la misma en la que se casaron mis papás', cuenta Jairo, quien a sus 60 años lleva ya más de media vida junto a Maribel.
Por su parte, para Blanca y Andrés, de 27 y 29 años, se trató de congregar a sus seres queridos. 'Es la fecha en la que todos nuestros familiares que vivían fuera podían llegar y compartir con nosotros', dice la joven comunicadora y especialista, quien con su esposo, profesional en negocios internacionales, coincide en que fue una buena decisión, pues cada celebración de aniversario es aún más emotiva por 'la carga emocional que tiene en esa época'.
En cambio, para Lizeth y Alfredo se trata de no esperar más. 'Llevamos seis años de relación, ya él tiene 34 y yo 35 años, así que no queríamos esperar por seis meses o un año más para casarnos. Además, es una época de celebraciones y festividades que tiene la alegría de la familia', detalla Lizeth.
Hablan los expertos. Para los profesionales en la ‘industria’ de las bodas, las razones de la popularidad de diciembre son similares.
Juan Pablo Estrada, wedding planner del Hotel Sofitel Legend Santa Clara, en Cartagena, considera que las parejas contraen matrimonio en el último mes del año principalmente por tres razones: 'Primero porque las personas tienen disponibilidad de tiempo. Segundo porque también tienen dinero (por ejemplo por las primas) y tercero porque en la época se dan manifestaciones de amor y unión familiar', detalla.
Además, añade que en el caso particular de la costa Caribe colombiana en este mes el clima mejora con la llegada de las brisas.
Magdalena Triana, coordinadora de eventos en el área de banquetes del Hotel El Prado, concuerda con él, pero considera que las razones de más peso son de tipo emocional, no económico.
'Pienso que es una época de romanticismo y sentimentalismo. No es por dinero porque en junio también pagan primas y no se casan tanto. No hay la misma demanda', detalla la profesional, quien tiene 19 años de experiencia en el sector.
En cambio, para la Arquidiócesis de Barranquilla, cuyos sacerdotes unen en matrimonio a muchas de estas parejas, la respuesta va ligada a la tradición de celebrar en familia durante esta época del año. También señala que en muchas ocasiones la familia toma vacaciones para poder celebrar de manera más cercana y fraterna las bodas, y que el ambiente de diciembre, cuando la gente vive más alegre y más unida, hace que este tiempo sea propicio para la celebración de matrimonios.
Demanda de fechas. Los dos expertos en bodas explican que en el caso de ambos hoteles, a pesar de la gran demanda de salones para llevar a cabo estas celebraciones, los precios se mantienen iguales todos los meses del año, aunque se dificulta conseguir cupos si no se reserva con anterioridad.
En cuanto a las fechas Estrada explica que la mayoría de las bodas decembrinas tienen lugar del primero al 20 de diciembre, pues 'antes de las fiestas de Navidad y año nuevo Cartagena está todavía tranquila. Después del 24 la ciudad se empieza a llenar y el tema de las bodas baja, porque son más costosos los tiquetes y es más difícil conseguir habitaciones de hotel. Toda la parte logística se complica'.
A lo largo del año, el Santa Clara celebra unas cuatro bodas al mes, mientras que en esos 20 días de diciembre llega a albergar hasta nueve matrimonios.
Por su parte, los salones reservados en el Hotel el Prado durante el mes de diciembre son en un 90% para celebrar uniones matrimoniales.
