El equipo se lució, destacó las virtudes de Enamorado, autor de tres de los cuatro goles clave de la final; resucitó a Teo, los porteros no hicieron extrañar a Viera, le dio oportunidad a los del semillero, Canchimbo se mostró como futura estrella, El técnico Arias puso orden y estrategia, y sembró mística en la nómina.
Recordar al San José hoy no es mirar al pasado con nostalgia, sino reconocer un patrón histórico que tiende a repetirse. Las rutas se tensan, se militarizan o se cuestionan, pero no dejan de existir.
El golpe nunca ha corregido nada, ese cuento de los abuelos de decir que “la letra con sangre entra”, no es válido. En primer lugar, porque con los golpes el niño obedece por temor y no por respeto, que es lo que se quiere. En segundo lugar, ¿qué hace un padre cuando el menor le dice que no le dolió el golpe? Con los golpes lo único que queda es el resentimiento del niño hacia los padres.
Diciembre trae, con sus brisas y cielos azules, una disposición distinta, una necesidad casi involuntaria de aferrarse a las buenas noticias. Barranquilla se siente diferente, con una ligera sensación de alivio que se cuela en la rutina diaria.
La única forma de balancear los ingresos y los gastos es evitando la inflación presupuestal, ya sea por la vía de arbitrar mayores recursos, lo que quedó descartado con el archivo del proyecto de ley de financiamiento, o mediante el recorte del gasto, descartado por el gobierno.