La vida es mucho mejor cuando la compartimos con personas que nos quieran ver felices, que se alegran por nuestra alegría -y es que ya bastante tenemos con aquellos que se esfuerzan para que nos vaya mal-. Amigos que se pongan más contentos que nosotros cuando ganamos un premio, alcanzamos un logro, realizamos un sueño; y que no dejen que la envidia los haga competir con nosotros y disfrutar tácitamente de nuestros fracasos.
El baterista falleció a sus 50 años en un hotel en Bogotá.
La menor recolectó el dinero para comprar materiales de manualidad.
Los dos futbolistas estrellas llegaron casi a la vez al PSG para inaugurar una nueva era.
Entre charlas y tertulias, en el ejercicio del oficio, en la ventana y el pasillo, en los recorridos cotidianos he sentido y he vivido el dolor de los amigos despidiendo a los amigos, he encontrado el sentimiento en pedacitos y he querido recogerlo desde el piso, suturarlo y elevarlo en el camino.