Manuela Calvi no fue la única sorprendida. La bailarina y modelo uruguaya, novia de Santiago Mele, no tenía ni idea de lo que el arquero de Junior alistaba en medio de la celebración de la conquista de la décima estrella de Junior.
'¿Yo? ¡No tengo ni idea!', alcanzó a decir antes de subir a la tarima a atender el repentino llamado de Mele.
Ya la fiesta en la Ventana de Campeones había avanzado con discursos jubilosos y jocosos de Vladimir Hernández, Carlos Bacca y Wálmer Pacheco, quien 'dejó la voz en Medellín', como le dijo el alcalde Jaime Pumarejo ante el concierto de gallos que se escuchó cuando habló y cantó el lateral derecho barranquillero. Hasta Fuad Char Abdala se había animado a saltar en medio de los jugadores cuando sonaba una de las canciones de las barras.
Todo era un carnaval rojiblanco relacionado con la décima estrella en el escudo, hasta que Mele tomó el micrófono y dejó a todos los presentes sorprendidos.
Luego de agradecer a Jefferson Martínez y pedir aplausos para él por su buen nivel cuando lo reemplazó por estar en la selección Uruguay y por la magnífica relación que tienen en el equipo, Mele llamó a 'Manu', como le dice a su novia.
Esto se lo queremos dedicar a nuestras familias, que son las que se bancan todo, las buenas, las malas, las puteadas, todo. Esto es para ustedes, disfruten. En especial vos', dijo señalando a la charrúa.
'Todo el mundo y vos sabes que sos mi señora, pero todavía no te puse el anillo, ¡y acá lo tengo! ¡Ven acá! ¡Ven!', pidió Mele.
'¡Si pidió matrimonio no se va! ¡No se va!', gritó Hómer Martínez arrebatándole el micrófono al cuidapalos de 26 años.
Manuela Calvi solo tardó unos segundos en subir a la tarima. 'Olé, olé, olé, oleeee... Manu, Manu', coreó Mele mientras esperaba a su amada.
Al llegar, el cancerbero uruguayo se arrodilló y mostró el anillo de compromiso.
Calvi, que tenía puesta una gorra de Junior, se conmovió y bajó a abrazarlo y darle un beso al portero, en medio de los gritos y los aplausos del público.
El alcalde Jaime Pumarejo, Alejandro Char el cuerpo técnico y el resto de jugadores fueron testigos cercanos y respaldaron al compañero en su escena amorosa.
'Olé, olé, olé, oléeee... Mele, Meleee', empezó a corear la afición de los ‘Tiburones’.
Una imagen más de felicidad, pasión y amor que deja este título que hace un mes estaba en los pronósticos de pocos.
