La Conferencia Episcopal de Colombia se pronunció este martes sobre la decisión del pasado lunes de la Corte Constitucional de inhibirse frente a la demanda que pedía penalizar totalmente el aborto y no discutir la ponencia que planteaba la despenalización del mismo durante los tres primeros meses de embarazo.
El presidente de la Comisión Episcopal de Promoción y Defensa de la Vida, monseñor Juan Vicente Córdoba, puso de presente en rueda de prensa la posición de la Iglesia Católica sobre este asunto: 'No hagamos de dioses, no dispongamos de la vida de los demás como si fuéramos dioses. (…) Y con humildad ante el creador respetemos la vida y que sea para el sentido que tiene de alabanza a Dios y felicidad de las personas (…). Nunca acabemos la vida, que no nos toca a nosotros'.
Frente a la decisión del alto tribunal guardián de la Carta Política, de inhibirse de fallar por vicios de forma, el religioso dijo que 'lo que realizó la Corte es como un alto en el camino, pero no ha llegado a la cima, entonces lo tomamos así en la Iglesia, y continuamos lo que el Congreso asumirá y es que la vida se respeta desde la concepción hasta la muerte natural'.
Y más adelante afiló sus críticas, en las que dijo que se trataba de 'una Corte que se empecina en dominar en el país', que además 'no son elegidos popularmente', y con cuyas decisiones 'todos los millones de colombianos tenemos que agachar la cabeza'. Por lo que propuso que 'esto se debe someter más a unos debates en el Congreso, que es el que tiene la facultad de cambiar la Constitución'.
Acerca de la postura del tribunal constitucional, que frecuentemente ha sido progresista en asuntos como los del aborto, monseñor dijo que la Iglesia no era juez.
'No estamos para juzgar a nadie y menos a la Corte, son magistrados bien preparados que tienen una responsabilidad grande, pero no estamos de acuerdo con las sentencias a favor del aborto, y esa es nuestra voz de protesta', sostuvo.
Y aunque la institución del catolicismo, según Córdoba, no funge de juez en estos casos, sí se constituye en una voz para su comunidad religiosa, aclaró.
'Sin ánimo de discriminar, es bueno que los católicos sepan la posición de la Conferencia Episcopal. Estamos para servir y eso implica hablar de los temas álgidos, especialmente la vida. La vida es sagrada, la Constitución dice que la vida es inviolable y que no habrá pena de muerte desde la concepción hasta la muerte natural', consideró.
Las tres causales
En relación con las tres causales por las que actualmente es permitido abortar en Colombia: cuando el embarazo sea producto de una violación, cuando haya malformación en el feto y cuando represente un peligro para la vida y la salud de la mujer, monseñor Córdoba las calificó como 'disculpas que se han inventado, pero no hay un derecho fundamental al aborto'.
Refiriéndose a cada una de las causales, el directivo de la Conferencia Episcopal advirtió sobre la de violación: 'Acompañamos y denunciamos las violaciones a mujeres, (…) nos oponemos, que esas personas, sean enfermas o delincuentes, vayan a la cárcel o a un siquiátrico. (…) Pero el bebé dice que se la dedican a él con pena de muerte y al que cometió la violación no le hicieron nada. (…) Él no tiene por qué sufrir las consecuencias del error de los mayores'.
Frente a la de malformación del feto, señaló que 'ninguna discapacidad es inviable con la vida. Las personas discapacitadas son el brillo más elocuente de la dignidad humana'.
Y acerca de la del peligro para la vida de la mujer, el religioso dijo que 'es el galeno el que debe tratar de salvarlos a los dos'.