Bastaron solo siete días para que el mundo musical mexicano se manchara de nuevo de sangre con el asesinato en pleno escenario de un cantante de corridos el pasado 1 de junio, en el estado de Morelos.
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El cantante fue identificado como Julio Eusebio Labra, vocalista de una banda mexicana que hacía su presentación en un restaurante-bar de nombre El Huamuchilito, del municipio de Emiliano Zapata, cuando pistoleros abrieron fuego contra el hombre que estaba en tarima.
El crimen desató un caso en el interior del establecimiento nocturno, había asistentes que buscaban refugio y otros escaparon del lugar, según detallan testigos del hecho.
Julio Eusebio murió en el lugar debido a la gravedad de las heridas provocadas por los impactos de bala que recibió.
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Las autoridades mexicanas dijeron que ya iniciaron las investigaciones respectivas para dar con los responsables del homicidio, al tiempo en que ya se barajan varias hipótesis que explicarían el motivo detrás del crimen.
De acuerdo con el secretario de Seguridad del estado de Morelos, Miguel Ángel Urrutia Lozano, el hecho de sangre estaría vinculado a un lío pasional, aunque tampoco se descarta que este caso estaría relacionado con el crimen organizado en México.
Este nuevo homicidio de un cantante se da siete días después del secuestro y asesinato de los cinco integrantes de la banda musical mexicana Grupo Fugitivo que fueron interceptados el pasado domingo 25 de mayo en momentos en que se desplazaban en una camioneta a un evento privado en la ciudad de Reynosa, Tamaulipas, para que el que habían sido contratados.
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De acuerdo con las primeras investigaciones, se pudo establecer que los integrantes de la agrupación fueron privados de su libertad alrededor de las 10:00 de la noche de ese domingo, día que no se supo más de ellos hasta el 29 cuando la Fiscalía General de Justicia de Tamaulipas confirmó el hallazgo sin vida de los cinco integrantes.
Tras ello, las autoridades realizaron un operativo en el que lograron la detención de nueve individuos que serían los presuntos responsables del crimen y quienes, de acuerdo con las investigaciones, son parte del Cártel del Golfo, facción ‘Los Metros’, que opera en la ciudad de Reynosa.
En el comunicado se explicó que tras el homicidio de los cinco músicos, las autoridades desarrollaron líneas de investigación, con lo que se obtuvo la ubicación de tres domicilios donde se resguardaban integrantes de un grupo delictivo, vinculados a dicho evento, a quienes aprehendieron.
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