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El COVID-19 ha activado las alarmas a nivel mundial, no solo por sus índices de letalidad, sino por la abrumadora capacidad de transmisión y contagio.

A este último hecho, se añade una cuestión que pone en aprietos a la comunidad médica, y es que este virus puede estar presente en personas totalmente asintomáticas, las cuales son portadoras del mismo y pueden transmitirlo al resto de la población.

Esto conlleva una mayor dificultad a la hora de frenar su propagación.

Kevin Vásquez, Ingeniero de sistema, considera que, a pesar de vivir actualmente en una situación tan desafortunada, esta ha sido una oportunidad para reconocer la importancia de los procesos tecnológicos en el tratamiento y la mitigación de la crisis.

'Ante esta situación, era de esperar que los principales países líderes en desarrollo tecnológico utilizaran los múltiples usos y aplicaciones que pueden extraerse de las nuevas tecnologías para intentar poner freno a la acelerada expansión del coronavirus COVID-19', comenta Vásquez.

Aplicaciones y Chatbots.

Sin duda, las aplicaciones móviles, los gadgets y los chats inteligentes no podían faltar para hacer frente al coronavirus.

A través de portales web especializados y plataformas digitales se ha conseguido evitar el desplazamiento de las personas a los centros de salud y, por tanto, nuevos contagios.

El sistema es sencillo. Básicamente consiste en registrarte en dichas plataformas de las entidades Prestadoras de Salud y crear un usuario con todos los datos personales. Tras crear un usuario, la persona registrada debe diligenciar un formulario online en el que se añaden datos tales como la ciudad en la que se encuentra, si presenta sintomatología o si ha viajado a zonas de alto riesgo.

Después DE incluir los datos, se genera un proceso para brindar la atención requerida. En muchas partes del mundo si la persona se desplaza por el país, debe enseñar un código QR o alguna constancia que recibió electrónicamente.

De este modo, también las autoridades sanitarias tienen un registro aproximado sobre los posibles casos, así como la localidad donde se encuentran los mayores focos de contagio.

Por otro lado, ya existen aplicaciones móviles que han resultado fundamental para el control de la propagación del COVID-19.

Son apps y programas que se basan en un sistema de localización GPS a través del cual los usuarios pueden saber si en sus barrios previamente se han detectado casos de COVID-19, así como la fecha en la que se confirmó el contagio.

Además, también muestran un panorama de vulnerabilidad al virus teniendo en cuenta aspectos como condiciones, localización y habitantes. Comercio seguro. En Colombia la tecnología ha sido el aliado perfecto para muchos sectores comerciales, ha servido como herramienta para mitigar el impacto negativo que pueden estar teniendo al no recibir clientes o compradores. Restaurantes, almacenes de ropa, farmacias, centros educativos, entre otros, han comenzado a ofrecer sus servicios a través de aplicaciones de domicilio, o páginas virtuales con el fin de no generar perdidas y contribuir a la mitigación del Coronavirus.

Ángel Otalora, programador de software, explica que se han diseñado otras aplicaciones dirigidas a realizar seguimientos médicos a las personas que se encuentran en autocuarentena en su domicilio.

A través de sistemas de geolocalización, reciben una alerta respecto de a qué personas se les debe imponer la autocuarentena teniendo en cuenta si han estado a menos de 2 metros de una persona contagiada-. Una vez informado de la autocuarentena, la persona aislada recibe llamadas para efectuar un seguimiento de los síntomas y evolución de la enfermedad.

En los procesos de desinfección se han fabricado cabinas con estructuras de aluminio y paredes en PVC. El diseño tiene tres pulverizadores, uno en la parte superior, otro en la mitad y uno más en la parte inferior, con la finalidad de que el producto que ejerce como nebulizador y el cual se utiliza para desinfectar, cubra la mayor parte del cuerpo.

Según Guillermo Boom Urueta y Royner Barceló, Ingenieros que fabrican estas cabinas comentan que el proceso del primer prototipo duró en fabricación dos días y cuatro días más en pruebas de funcionamiento. 'Son unas cabinas automáticas en las que ingresa la persona, acerca su mano a un sensor de presencia y de manera inmediata y durante 6 segundos se activan los nebulizadores o pulverizadores que son una mezcla de alcohol y otros componentes. Estos cubren todo el cuerpo haciendo el proceso de desinfección a la persona que ingresa a la cabina', sostuvo Boom.

A pesar de los muchos avances tecnológicos que se han conseguido adaptar a las nuevas necesidades creadas por esta situación de pandemia global. Y que sin duda han sido claves para controlar la rápida expansión del Coronavirus de manera eficaz.

Es importante entender que la tecnología no serviría de nada sin el esfuerzo diario de las personas que están luchando actualmente contra el COVID-19 y de todos aquellos que con tan solo quedarse en casa contribuyen a la mitigación del virus.