Arturo Reyes habló de su salida de Junior: “Los jugadores van a reaccionar”
El samario habló con EL HERALDO de su gestión en su segundo ciclo con el cuadro rojiblanco. Se marcha sin resentimientos y resalta que Jhon Vélez y Léider Berdugo son la herencia que deja.
Olvídense que lanzará una granada. No es un adiós con dinamita. No encendió ninguna polémica. No destapó un escándalo. Se marcha en paz. No hay drama. No se victimizó, no se quejó. En sus palabras no se percibe resentimiento ni rencor. Arturo Reyes aceptó con tranquilidad y resignación su salida de Junior.
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“Simplemente no se me dieron los resultados, y los resultados mandan”, simplifica el entrenador samario,
En diálogo con EL HERALDO, se refirió a la decisión que tomaron los directivos e hizo un balance de su gestión al frente del equipo.
Reyes resalta que su principal herencia en el club tiburón es el surgimiento de Jhon Vélez y Léider Berdugo. Y hace un mea culpa de los aspectos en los que pudo equivocarse.
Considera que el grupo de jugadores va a pellizcarse con el nuevo entrenador (no sabía que era ‘Bolillo’ Gómez al momento de la entrevista), y reencontrará la ruta del gol y del triunfo.
¿Qué conclusiones saca de lo que fue su segundo ciclo en Junior?
Los resultados no nos acompañaron, infortunadamente. El fútbol es así, unas veces la pelota va al palo y entra, y otras veces va al palo y sale. Esta vez, en cuanto a efectividad, estuvimos muy por debajo. Los partidos se ganan con goles. Uno como entrenador tiene que saber que nuestro rol depende de los resultados, y los resultados son los que mandan.
¿La mala campaña solo se le achaca a la falta de definición?
Es un punto importante. Obviamente no todo se puede basar en eso, pero es claro que cuando anotas primero que el rival, tienes la posibilidad de jugar con el viento a favor. Casi siempre estuvimos con el marcador en contra porque carecimos de efectividad. No pudimos tener una nómina base, eso también pudo ser inconveniente. Como cuerpo técnico estamos mirando y analizando qué hicimos bien, en qué nos equivocamos. Trabajamos con honestidad y seriedad, pero los resultados mandan.
¿De qué se arrepiente?
De pronto debí tener una nómina un poco más amplia. Creo que me faltó un atacante más. También tuvimos inconvenientes con la zona de defensores, para donde vinieron algunos jugadores y no se pudieron quedar por múltiples razones. Eso es un aspecto que debo tener en cuenta en mi futuro como entrenador.
¿Qué autocrítica hace?
Acabo de decir una, que como cuerpo técnico tengo que mirar bien el armado de la nómina. Me hicieron falta algunos jugadores. No llegaron porque algunas veces pensamos que con el grupo que teníamos podíamos sacar buenos resultados. El comienzo del torneo nos mostró que nos hizo falta reforzar un poco más en alguna posición.
¿Algún jugador de los que trajo lo decepcionó?
No, la verdad, con el grupo de jugadores estoy muy agradecido. Siempre lo dije en las ruedas de prensa: los jugadores mostraron una gran disposición y muchos deseos de buscar la posibilidad de jugar en este equipo. Todos jugaron con excepción de Enrique Serje, Howell Mena y el arquero Jeffersson Martínez.
¿Qué herencia le deja Arturo Reyes a Junior?
Se había hablado de renovar un poco la nómina y en ese aspecto algo se hizo al traer algunos jugadores jóvenes de otros equipos. Creo que con el tiempo se van a consolidar y le darán triunfos y alegrías a la institución. Aparte de eso, jugadores de las categorías menores subieron al equipo profesional y tuvieron oportunidad de jugar Léider Berdugo y Jhon Vélez, a quien pusimos apenas llegó de la Selección sub-20. Vélez va a ser un jugador importante en Junior y con él se podrá hacer una negociación internacional en el futuro.
¿Qué más se atreve a pronosticar de Vélez?
Es un joven humilde, muy trabajador, que se ha ganado todo a pulso. El profe Roberto Peñaloza lo llevó al Barranquilla FC y cuando yo lo tuve, siempre fue titular en el equipo de la B. Nos ayudó mucho en la mitad del campo con Berdugo y Luis Sandoval. Su rendimiento le dio para que pensáramos que podía ser importante en Junior. Va a ser un jugador destacado en la selección Colombia a mediano y largo plazo.
¿Qué le falta Berdugo?
Tener más partidos, jugar, ir entendiendo esa posición en la que está acostumbrándose a hacer grandes recorridos. Tiene una gran disposición, tiene calidad y es reconocido por sus compañeros, saben lo que él le puede brindar al equipo.
¿Se despedirá de los jugadores o no lo va a hacer?
No creo que lo vaya a hacer. Hay que dejar que cada uno tenga su espacio. En estos momentos es normal que sientan el golpe de un cambio de técnico, eso siempre es difícil. Quiero que a estos jugadores les vaya bien y que pongan a Junior donde se merece. Pueden reaccionar y van a reaccionar, van a pelear por el título.
¿Cómo fue su relación con jugadores veteranos como Sebastián Viera, Carlos Bacca, Juan Fernando Quintero y Didier Moreno?
Con todos ya había trabajado, con Bacca y ‘Juanfer’ en la selección Colombia (de mayores), con Didier y Sebastián, en mi primer ciclo en Junior. Yo soy de los entrenadores que intenta siempre que el buen ambiente prime y eso fue lo que hicimos. No tengo ninguna queja de ellos, al contrario, ellos fueron los jugadores que intentaron empujar el barco hacia adelante.
¿Cree que se le cierran las puertas en Junior?
No sé, creo que hice un trabajo con honestidad y seriedad, con compromiso. Estoy muy agradecido con los hinchas, con los directivos y el grupo de jugadores, simplemente las cosas no salieron bien. Traté de ser un trabajador fiel y confiable.
¿Qué lecciones personales rescata de esta segunda experiencia en Junior?
Muchas experiencias positivas. Dirigir un equipo como Junior ayuda mucho a crecer. Es importante para uno como entrenador.
