El Mundial de Brasil tiene, por ahora, dos claros protagonistas: Neymar y Messi, quienes han sido capaces de cargar con el peso de sus selecciones al contrario que Cristiano Ronaldo, Wayne Rooney, Diego Costa y Mario Balotelli, desaparecidos e imbuidos en la debacle de sus equipos.
Las altas expectativas portuguesas entorno al capitán, aquejado de una lesión en la rodilla desde el comienzo del torneo, enfocaron la atención en el madridista, Balón de Oro 2014, quien ni celebró el único gol que consiguió anotar en el campeonato, en la victoria ante Ghana que no sirvió a Portugal para pasar a octavos.
Dueño y señor de los focos en la selección lusa, Ronaldo llegó a confesar lo que pensaba de sus compañeros y sin morderse la lengua aseguró que el equipo estaba 'limitadísimo para jugar el Mundial, donde, a su juicio, 'Portugal nunca fue favorita'.
Tanto Cristiano, como Rooney, Costa y Balotelli han dejado la fiesta para Neymar y Messi, auténticos protagonistas del torneo, a la que también parecen querer unirse Thomas Müller, Arjen Robben y James Rodríguez, apuestos candidatos para suplir la ausencia de los desaparecidos del Mundial.
Suárez, otra decepción. A pesar de tener un buen inicio de Mundial, al anotarle dos tantos importantísimos a Inglaterra, el delantero uruguayo Luis Suárez se convirtió en la principal decepción de la máxima cita orbital al ser expulsado, de manera infantil, de la competición, por morder al defensor italiano Giorgio Chiellini.
La Comisión Disciplinaria de la Fifa decidió sancionar a Suárez con 9 partidos e inhabilitarle durante cuatro meses de 'ejercer cualquier clase de actividad relacionada con el fútbol'. Además, le impuso una multa que asciende a 100 000 francos suizos (unos 82.200 euros y 111.700 dólares). El artillero de la Celeste tuvo que abandonar la concentración de su Selección y viajar de manera inmediata a su país.
Suárez venía de hacer una gran temporada con el Liverpool y todo apuntaba a que este sería su Mundial.
Wayne Rooney (Inglaterra)
El delantero inglés Wayne Rooney, que en 194 minutos solo hizo una diana y tres incursiones individuales en el área, de las que tanto hacen temer a los rivales del Manchester United. Con un triste 44,4 % de disparos entre los tres palos, Rooney no pudo evitar que Inglaterra cerrara el Grupo D, el grupo de la muerte, donde perdieron contra Italia, Uruguay y la sorpresa del Mundial, Costa Rica, que acabó líder de la primera fase ante las tres campeonas.
Mario Balotelli (Italia)
El italiano Mario Balotelli no rindió lo que se esperaba de él en Brasil, donde ni él ni Pirlo, alma mater de Italia, pudieron evitar la eliminación de la Azzurra ni la dimisión del técnico Cesare Prandelli. Llamado a ser una de las piezas claves de la renovación generacional de Italia, el delantero del Milán, apenas vio puerta en una ocasión, para decantar el primer partido del grupo, contra Inglaterra que supuso la única victoria italiana.
Diego Costa (España)
El delantero brasileño nacionalizado español jugó los primeros dos encuentros, en los que La Roja aún tenía opciones de pasar a octavos y donde no consiguió desplegar el juego que ha llamado la atención de los grandes clubes europeos. El probable ex del Atlético de Madrid sufrió la ira de la hinchada brasileña a la que no le gustó que escogiera a España por delante de su país de nacimiento y que pitó a Costa cada vez que tocaba el balón en Salvador y en Río de Janeiro.