El suizo Stanislas Wawrinka ganó ayer su primer título del Grand Slam al vencer al español Rafael Nadal por 6-3, 6-2, 3-6 y 6-3, en dos horas y 21 minutos, en la final del Abierto de Australia, donde el español jugó visiblemente disminuido por una lesión en la espalda.
A pesar de ese inconveniente, Nadal fue capaz de ganar el tercer set, y luchar hasta el final, después de recibir masaje en el vestuario y dos veces sobre la pista por el fisio del torneo, Hugo Gravil.
Pese a esta ventaja Wawrinka naufragó en la tercera manga, presionado por la obligación de rematar el partido cuando se encontraba en una situación de dominio ante el número uno del mundo, al que demolió con sus saques directos, 19 en total.
En la cuarta manga, el suizo Wawrinka rompió dos veces el servicio de Nadal, controló mejor sus nervios y confirmó su victoria de forma más fácil.
Con su victoria, la mejor de su carrera con la que rompe el 12-0 de su balance desfavorable con Nadal para lograr el sexto título de su currículo, Wawrinka sobrepasará por primera vez a su compatriota Roger Federer en la lista mundial, y aparecerá tercero del mundo hoy, con 5.710 puntos, seguido del argentino Juan Martín del Potro, con 5.370, mientras que Federer bajará al octavo puesto.
Nadal, que buscaba su 14 título de Grand Slam con lo que hubiera igualado con el estadounidense Pete Sampras para convertirse en el tercer jugador en la historia en ganar dos veces cada uno de los cuatro grandes torneos, seguirá primero, en lo alto de la clasificación con 14.330 puntos, una gran ventaja con respecto al serbio Novak Djokovic, segundo, con 10.620 puntos.
'En el peloteo sentí algo, mi espalda se quedó clavada. Me estaba limitando cada vez que sacaba, me sentía sacando muy bien, pero fue cada vez peor, hasta que no podía más', dijo Nadal.