En la época en que la Selección Colombia fue dirigida por José Pékerman, hubo un período de buenos y simultáneos momentos de alta frecuencia goleadora de los delanteros Carlos Bacca y Jackson Martínez  en sus respectivos  clubes. Este hecho generaba, en una gran parte de los hinchas y periodistas, la opinión de la obligatoria presencia de uno de ellos como socio de Falcao Garcia en el frente de ataque. 

Se ilusionaban con el incremento de goles de la Selección con la sumatoria de los goles de unos y otro. Pero Pékerman decidía no por expectativas matemáticas, sino por creencias funcionales: era Teófilo Gutiérrez el elegido. 

Por virtudes técnicas, inteligencia táctica y diferente gestión de su talento a las formas que utilizaba Falcao, Teófilo se transformó en el mejor coequipero, en el más eficiente complemento del goleador y pieza clave en el funcionamiento general. 

En estos días, y a raíz del gran momento goleador de Muriel y Zapata en el Atalanta italiano, se plantea la presencia de ambos comandando el frente de ataque del equipo ahora dirigido por Reinaldo Rueda.

No solo que jueguen juntos, porque ya lo han hecho con Muriel por la zona izquierda (ante Venezuela bien; ante Chile y Uruguay mal y muy mal), sino los dos por el centro. 

En Italia, poquísimas veces lo hacen. Atalanta, y su técnico, prefieren tener a uno solo como centro delantero. Y mal no les ha ido: clasificado a la Champions League y uno de los equipos más goleadores de Europa. 

Su propuesta hiper ofensiva y la presencia de muchos jugadores cerca del área y alrededor de ese centro delantero con muy buenas condiciones técnicas incrementan el número de situaciones de gol para Zapata y Muriel. 

Yo creo que pueden convivir por el centro porque son diferentes, son talentos complementarios, porque Zapata es fuerza pura y más de área, y Muriel posee más técnica, más habilidad y mejor panorama para arrancar unos metros más atrás. Pero con eso solo no alcanza, sino además, y sobretodo, de qué forma Colombia, como equipo, funciona ofensivamente para generar un mayor número de jugadas de gol. Un aspecto deficitario en el último tiempo. 

En aquella pareja, Teófilo ayudaba a ser mejor a Falcao y al quehacer grupal. En la llave Muriel y Zapata no hay un Teo, por lo tanto se va necesitar de un mejor nivel de James ( que no se lesione y tenga continuidad) y de Cardona (que por fin sea titular en Boca Juniors). Del desequilibrio de Cuadrado, Diaz y Villa, estos sí titulares y con buenos rendimientos. De laterales con capacidad ofensiva y en buen nivel (en estos momentos no los hay). 

En fin, de eso y otras tareas (futbolísticas y emocionales) se trata la nueva misión de Reinaldo Rueda y su cuerpo técnico.