Recaudo tributario
Es evidente que el recaudo de 2022 superará al de 2021 en un monto que oscila entre $52 y $63 billones y a la última proyección para el año en entre $29 y $40 billones. Esto es fruto en alto grado de la reforma tributaria de 2019, particularmente porque la factura electrónica ha incorporado sumas ingentes al torrente tributario y ha facilitado la gestión de la DIAN. Reforma que seguirá acrecentando el recaudo al empezar a operar ahora las figuras del documento equivalente electrónico y de los acuses a facturas de crédito, lo que permite vaticinar que el incremento de los recaudos será también muy alto en 2023. Asumiendo apenas un 15% de aumento, el recaudo excederá $260 billones en 2023, casi duplicando el de 2018.
Cursa en el Congreso un proyecto de reforma tributaria confiscatorio y punitivo que pagarán con sangre todos los colombianos, independientemente de su estado socioeconómico, diseñado para combatir la inversión, eliminar la iniciativa empresarial y destruir los mercados inmobiliario y de valores. Para analizar cualquier reforma, es necesario validar el monto de los ingresos con los que ya se cuenta. Por eso, carece de lógica que, hasta ahora, sistemáticamente se haya ignorado que el recaudo tributario nacional viene creciendo a un ritmo desbocado, y que excederá el presupuesto fijado para este año en mucho más que los $25 billones que se pretende obtener de ella.
Las cifras son claras. La DIAN reportó un recaudo tributario de $136,2 billones a julio de 2022. Esta cifra representa un 36,2% de incremento sobre la registrada para el mismo período de 2021, y excede en 15,8% el ingreso acumulado proyectado para ese período en este año. Como lo señalan medios especializados, es apenas $60 billones menos que el último estimado del recaudo tributario total para el año, que es $196,7 billones.
Con un recaudo mensual que está excediendo los $20 billones, es obvio que ese estimado será ampliamente superado. Al aplicar el 15,8% de exceso de recaudo a julio al estimado del año, éste debiera ser ajustado en $31 billones, a $228 billones. Por otro lado, se encuentra que en los últimos 5 años el recaudo de los primeros 7 meses ha promediado ser 60,3% del recaudo anual, lo que, aplicado al recaudo hasta julio, lleva a estimar un total de $226 billones para 2022. De usar para el cálculo el porcentaje de 2021, que fue 57,5% del total, el estimado subiría a $237 billones.
Es evidente que el recaudo de 2022 superará al de 2021 en un monto que oscila entre $52 y $63 billones y a la última proyección para el año en entre $29 y $40 billones. Esto es fruto en alto grado de la reforma tributaria de 2019, particularmente porque la factura electrónica ha incorporado sumas ingentes al torrente tributario y ha facilitado la gestión de la DIAN. Reforma que seguirá acrecentando el recaudo al empezar a operar ahora las figuras del documento equivalente electrónico y de los acuses a facturas de crédito, lo que permite vaticinar que el incremento de los recaudos será también muy alto en 2023. Asumiendo apenas un 15% de aumento, el recaudo excederá $260 billones en 2023, casi duplicando el de 2018.
Es natural que en el ministerio de Hacienda no miren estas cifras, pues su voracidad fiscalista es insaciable. Como tampoco lo es que tampoco lo hagan en la academia o en los ‘centros de pensamiento’. Allá están tan ocupados recitando las teorías y letanías de la escuela (iglesia) económica colombiana que no tienen tiempo para ocuparse de nimiedades como los hechos reales. Lo que es realmente incomprensible es que no lo hagan quienes van a ser víctimas de la reforma.
Encuentro alentador y plausible que, después de muchos meses de ser evidente el acelere en los recaudos, el presidente de la Andi haya empezado a poner estos datos sobre la mesa, al defender al país de una reforma que, entre otras cosas, colapsará la actividad económica. Pero queda la pregunta: ¿Cuándo hablarán de ellos los demás empresarios y ciudadanos amenazados con la reforma? ¿No entienden que ésta, además de devastadora, es innecesaria, o, simplemente, no tienen tiempo para analizar los números?
Más Columnas de Opinión
¿Qué hacer con las tarifas de energía en la región Caribe?
Las altas tarifas de la energía en el Caribe son un problema social. La afirmación de que mes a mes cientos de miles de familias comen o pagan la luz no es lejana de la realidad. El recibo se puede llevar la cuarta parte de los ingresos de las f
Un faro de esperanza para la juventud
En medio del vendaval de desafíos que enfrenta la juventud contemporánea, marcada por la sombra ominosa de trastornos mentales que irrumpen cada vez más temprano en sus vidas, surge la necesidad imperiosa de tenderles una mano firme, de ofrecer
Café entre Evas
“Qué habría sido de las mujeres en el patriarcado sin el entramado de mujeres alrededor, a un lado, atrás de una, adelante, guiando el camino, aguantando juntas. ¿Qué sería de nosotras sin nuestras amigas? ¿Qué sería de las mu
Para el Descanso
La revisión de los titulares de prensa, o de cualquier otro medio de comunicación, se ha convertido en una seguidilla de sobresaltos. Quizá sea porque en estos tiempos todo se actualiza permanentemente, o porque la dependencia del clic induce l