La primera vacuna de la historia de la humanidad, fue aplicada por Edward Jenner, médico Inglés el 1o. de julio de 1796, comprobando la efectividad de la vacuna contra la viruela que él mismo desarrolló, inicialmente a partir de la enfermedad en el ganado vacuno. Posteriormente uno de sus seguidores, el l6 de julio de 1885 el químico francés Luis Pasteur, descubre la vacuna contra la rabia.
Pero, ya más de dos millones de personas fallecidas en Rusia y unas 15.000 en Francia, hacen 27 años, gracias a la vacuna, no se ha vuelto a presentar un caso en las comunidades, excepto 2, en el laboratorio de experimentación. Junto con la vacuna contra la peste bovina, estas dos temibles enfermedades han sido erradicadas. Posteriormente a estos descubrimientos y un gran número de vidas salvadas con otras vacunas importantes.
Existen personas que no creen ni aceptan las vacunas, ojalá no sufran la enfermedad. Si bien es cierto que en un número muy bajo de personas, la vacunación deja efectos colaterales, lo que acerca más a la probabilidad de que estos se relacione más con una respuesta individual, todavía no entendida.
Los comentarios sin fundamentos ni evidencias, para la difamación en contra de las vacunas, son inaceptables, sobre todo cuando provienen de personas que no tienen la formación ni entrenamiento necesario, ya que podrían traer graves consecuencias, ante su inminente utilización y necesidad de una inmunidad de rebaño, es decir más del 70% de la población con anticuerpos neutralizantes.
Las vacunas contra la Covid-19, más adelantadas, tienen inicialmente un rango alto de protección, 70-95%. Este es un buen resultado, ya que de aplicarse mediante un programa seleccionado, van a ser exitosas. Al mismo tiempo, creo se necesitan algunas cosas obligatorias para cualquier vacuna o medicamento. El primero es la evaluación por pares, lo cual conozco porque he sido evaluador de estudios e investigaciones muy importantes, y además he sido en otras investigaciones evaluado por los famosos pares, inclusive de la FDA, Federación de Drogas Americanas, similar a nuestro Invima en Colombia, quien no solo debe avalar la utilización de una vacuna, sino también impulsar a que en nuestro país tengamos pruebas de su eficacia y efectividad, camino que solo está siendo ejecutado por solo una de ellas. La facilidad de un Fast track, o camino rápido para la aprobación del uso de una vacuna, debido a la necesidad por el crecimiento de la pandemia, ha sido propuesto ya por dos fabricantes, Pfizer y Moderna, esto debe llenar también los mínimos requisitos obtenidos, los cuales no pueden ser violados.
Las vacunas no aparecieron ayer, son de origen muy antiguo, sus contradictores deben ser respetados, pero, también respetar la necesidad de una buena vacuna, la ciencia tiene que caminar lo más rápido posible, de lo contrario, el número de muertes por una enfermedad a la que su prevención va a contribuir la vacuna, no se puede retardar.
Sin omitir la obligación que tendremos del autocuidado para de esta forma cuidar a los demás, elemento importantísimo en el control de las enfermedades infecciosas, ligado al distanciamiento, el uso de mascarillas, las etiquetas de estornudo y tos, y contando con que al fin el mundo se lave las manos, podremos salir adelante. A los médicos, los mas sacrificados, exponiendo hasta la vida por atender a los demás, ojalá el mundo deje de reconocer héroes de papel y publicidad, para identificar realmente, que existen héroes permanentes, que nos hicimos no solo para curar y aliviar a los pacientes sino también para entregar la vida por ellos.
El día del médico fue ayer, ojalá algunos al menos, se hayan acordado de lo que somos y servimos a la humanidad