Insisto en que el fútbol es un juego, que hay que jugarlo. Algunos técnicos lo asimilan a la ‘alcancía chonchito’, aquella de la infancia donde nos enseñaban a ahorrar, al meter y meter puntos sin obtener más que eso, unas monedas sin rendimiento adicional. O sea, sin producir.
Mi abuela dejó alcancías hechas con vasos de mermelada, en los bolsillos de sus vestidos, dentro de zapatos y debajo de la cama que compartía con el abuelo. Tenía, por costumbre, tirar bajo de ella las monedas sueltas que le quedaban del ajetreo del día. Cuando los nietos crecimos y descubrimos esto último, tomábamos ‘prestado’ de allí. Hasta que la dueña de la ‘cama banco’ y de la ‘piso alcancía’ nos descubrió.
Cuando murió la abuela, encontramos pequeñas fortunas en billetes en desuso, moneda llenas de moho por el paso del tiempo y la evidencia que, hubiera sido mejor llevarlas al banco para que produjeran dividendos.
Al dinero hay que ponerlo a producir, de lo contrario se deprecia y, en esencia, no es ahorro sino pérdida.
Tal cual pasa con los técnicos de nuestra Liga que hablan de puntos, del grupo de los ocho, de si le faltan cuatro o cinco puntos para clasificar, de la presión alta, de no dejar jugar al contrario, de parar, que no jugar, tres o cuatro en el fondo. Tienen en su celular la calculadora siempre lista. Pero del fútbol bien jugado, muy poco. Esa ausencia del fútbol jugado, que no peleado o empujado, no le seduce a la hinchada. Y por eso se aleja de los estadios.
Recientemente nos contaba Teófilo Gutiérrez que el propósito de DT Farías es llegar a 40 puntos y es posible que los sumen en Junior. Tienen 31 puntos y restan 9.
Pero aquí hay que recordar que el primer propósito de los equipos en nuestra Liga es clasificar al G8, después ganar el grupo semifinal, jugar la final y ¡ganarla!
De lo contrario los 40 puntos serán como los ahorros de la abuela Silvia Rosa o como los 50 puntos de Jorge Luis Pinto con Millonarios en el 2019-1.
Se convertirán en gracioso recuerdo como el de la abuela y no tan grato como los 40 puntos. Si finalmente se suman...