Se paralizará el tráfico. La gente quedará pasmada, estupefacta, pensando que se trata de un fantasma o de ciencia ficción cuando aparezca en la ciudad un carro circulando por la calle, sin conductor.
Aunque parezca increíble, no nos sorprendería que antes de finalizar esta década llegara a Barranquilla uno de estos vehículos, un proyecto de Google, al cual están vinculadas la Mercedes Benz, Audi y Toyota. En San Francisco (Calif.) se están haciendo ya los primeros experimentos y no es raro ver al ‘carro Google’ estacionándose, solo, en cualquier parte de la ciudad. Es un hecho. Pero veamos cómo cambiará esto la ciudad futura. Ya no habrá que dar vueltas para conseguir estacionamiento, porque el carro lo detecta y se estaciona solo. No se necesitarán semáforos, ya que los sensores en los autos y en las calles regularán el tráfico y por ende se acabarán los comparendos, pues los carros son lo suficientemente inteligentes para saber lo que deben respetar. Al no dar tantas vueltas buscando parqueadero, el consumo de gasolina disminuirá considerablemente y el aire será más puro porque se manejará menos tiempo. Se podrá dormir en el carro, mientras este viaja solo. A pesar de que aún faltan varios años para que esto se generalice, ya hay preocupación en la ciudad y hemos notado que últimamente los semáforos, resentidos, titilan del susto de quedar obsoletos; los 7 u 8 policías de tránsito que acostumbran reunirse a conversar bajo el palo de matarratón se notan preocupados por su futuro; las motos de tránsito ya no rugen como antes, y los que ‘viven’ de los comparendos, alistan un paro nacional para pedirle al Gobierno que prohíba la entrada de estos vehículos al país.
Por Antonio Celia C.