La revictimización actual ante el asesinato del aspirante a la presidencia del país nos retrotrae en el tiempo y revive los síntomas del siglo pasado a partir de unos niveles de violencia que esperamos que no se repitan por la salud mental de todos los ciudadanos, que es precaria.
Los estruendosos fracasos que han tenido en el Congreso sus propuestas de reformas, y ahora su innecesaria y costosa “consulta popular” lo han descontrolado aún más, volviéndose aún más agresivo, con amenazas graves en la plaza pública, como esa de decir que “si a los amigos de Efraín Cepeda se les ocurre negar la consulta popular, el pueblo va a borrar a esos congresistas”
Uno de los puntos estará ubicado en el municipio de Bosconia, punto de partida para la conexión del Caribe con el interior del país.
Tengamos presente que la ciudad se proyectó en un desarrollo permanente, es una capital que ya no se detiene, que avanza, que supera dificultades, que abre nuevos horizontes.