En medio de los numerosos hinchas de Junior que estuvieron presentes en la derrota 2-0 ante Fortaleza el pasado domingo, en el estadio Metropolitano de Techo, hubo dos bogotanos vestidos de rojiblanco. Sí, leyó bien, dos bogotanos.
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¿Quién dijo que no hay junioristas cachacos? Muchos imaginan y suponen que los aficionados que abarrotaron las tribunas del escenario deportivo son caribeños que viven en la capital del país o que viajaron desde la región hasta suelo bogotano. Pues sí, la mayoría sí, pero hay una porción de fanáticos que son oriundos de Bogotá y otras partes del interior, como es el caso de Johan Pérez y su hijo Arjen Sebastián.
'No tengo nada de costeño (lo digo con respeto), pero que amo estos colores tanto como ustedes', dijo Johan a través de un hilo que se hizo viral en las red social X, sobre todo en la comunidad juniorista.
En la publicación Johan explicó cómo surgió su pasión rojiblanca y cómo se la transmitió a su pequeño de 5 años de edad, quien fue a ver al equipo por primera vez el domingo anterior, en el tropezón frente a Fortaleza.
Sentados en la tribuna oriental, rodeados de un calor humano y de fiesta por ver al actual campeón de Colombia, padre e hijo mostraron el amor especial que sienten por el club rojiblanco.
Fueron con la idea de mirar y apoyar a su amado equipo amado. Nunca se imaginaron todo lo que empezarían a disfrutar, a pesar de la derrota.
ASÍ NACIÓ EL AMOR
Johan, de 34 calendarios cumplidos y que actualmente vive en la localidad de Soacha, relata que esta pasión por la institución barranquillera comenzó, sin nunca haber conocido la capital atlanticense, gracias a su padre, Jaime Enrique Pérez.
'Yo soy bogotano de nacimiento, pero toda mi vida la he pasado en Soacha, que es un sitio que queda ahí pegado a Bogotá, en la zona sur. Es un tema de herencia, mi papá sin ser barranquillero, porque es bogotano, se hizo hincha de Junior. Él me cuenta que el primer Junior que vio fue el de 1977. Cuando empezó a ver fútbol fue el del equipo campeón de ese año. Ahí le empezó a gustar, ya después, mi tía mayor se casó con un señor barranquillero, pero radicado acá en Bogotá que obviamente es hincha de Junior. Ya había generado una relación gracias a mi papá y cuando Junior venía a Bogotá, mi tío los llevaba al estadio. Se generó esa cercanía y un amor que yo considero que mi papá me pasó, porque la primera vez que fui al estadio fue en el 93, a ver al Junior del ‘Pibe’. De ahí para acá ya ese amor no paró y fue creciendo', contó Johan en diálogo con EL HERALDO.
Este rolo, que es periodista y publicista, no quiso dejar a un lado la herencia y desde que nació su hijo, el 30 de abril de 2018, se encargó de que el amor que le inculcó su padre pasara a la otra generación.
Johan recuerda que unos días después de que su primogénito nació y fue dado de alta, se disputó el partido entre Junior y Boca Juniors, el 2 de mayo de 2018 en el ‘Metro’. Ese juego, correspondiente a la fase de grupos de la Copa Libertadores y que terminó empatado 1-1, le trae recuerdos porque lo vio cuando llevaba a su hijo rumbo a su casa.
'Fue un día muy particular. Fue el partido del recordado penalti de Luis Carlos (Ruiz). Si Junior ganaba, eliminaba a Boca. Yo iba con el bebé para la casa. Con estas anécdotas uno se da cuenta de todo lo que pasa en un momento. Ese año nació mi hijo y fue el año del mejor Junior que hemos visto en este ciclo', expresa feliz y orgulloso.
'Lo de mi hijo es igual al tema mío. Nació en Bogotá y ha vivido sus cinco añitos en Soacha. Es mi único hijo y, obviamente, lo amo demasiado. Se fue ligando mucho con el tema de Junior. Desde que nació siempre he tratado de ligarlo, por fortuna él como que ya iba sintiendo. Los niños hoy en día ya no son tan apasionados, por el tema de la tecnología. Ya no son tan apasionados como nosotros, pero él se sienta conmigo a ver los partidos, se sabe las canciones de Junior. Y nosotros tenemos una cábala y es que cinco o diez minutos antes de empezar los partidos, empezamos a cantar las canciones del equipo. Él canta las canciones y tiene su camiseta, está pendiente. Se le va a ir pegando cada vez más ese amor', expresó.
UNA EXPERIENCIA ÚNICA
Johan recuerda con alegría que ha ido a muchos partidos del ‘Tiburón’ en territorio bogotano, pero nunca había podido llevar a su hijo. Y la primera vez nunca se olvida.
Johan se alistó temprano con Arjen Sebastián y se pusieron su camiseta rojiblanca. Antes de salir, su esposa, Johanna Forero, también bogotana (no futbolera), les tomó una foto y se la mandó a través del celular. Él, para compartir su felicidad y hacer más especial el momento, la publicó en su cuenta de X (@jperezdeportes). Sin embargo, no contaba con que generaría tanto revuelo, y que el mismo Jefferson Martínez, arquero titular de Junior en ese cotejo, le iba a escribir y a prometer un obsequio a su hijo.
'Uno como periodista siempre mantiene activas sus redes sociales. X siempre la he mantenido con el tema Junior. Conozco muchas personas de Barranquilla con las que he hecho relaciones a través de la red social, pero después de poner la foto con mi hijo, la verdad fue una locura. Nos fuimos en el transporte público, y cuando iba caminando al estadio veía que llegaban notificaciones y notificaciones. Yo sí vi un comentario en la foto que decía, hoy se va con la 30 (número de Jefferson Martínez) del estadio. Yo no le puse cuidado en el momento al comentario y ni siquiera leí quién lo había escrito. Cuando llegamos a los alrededores del estadio, fuimos a un restaurante a comer algo, saco el celular y veo que la gente está comentando: ¡Uy, Jefferson!', relató Johan.
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'Yo sigo a Jefferson y vi que él ya me había escrito por mensaje directo y me dijo: ‘mi hermano, ¿cómo estás? ¿Dónde van a estar? Vamos a coordinar la entrega de la camiseta’. Y yo le dije, que era un gesto bonito y bacano. Lo reconozco y la verdad estoy inmensamente agradecido con Jefferson, porque ese día, a pesar de la derrota, a pesar de que el ambiente no fue bueno porque el equipo perdió, lo esperamos un buen rato y él salió. Le entregó la camiseta al niño y se tomó la foto con él. Eso para un niño de cinco años es muy bueno. Él me dijo: ‘papá, perdimos con Fortaleza, pero la pasamos rico’. Qué chévere que un niño de cinco años (reaccione así), cuando uno es tan pasional con el tema del equipo, porque todos lo decimos: nuestro estado de ánimo depende de Junior, si Junior gana somos felices, si Junior pierde somos tristes. Un niño de cinco años no lo ve así, igual lo disfrutó, fue muy feliz. Fue una experiencia muy bonita en el estadio, llegaron los chicos de la barra en la tribuna oriental repartiendo globos, le dieron y eso lo puso contento. Fue una experiencia muy bonita para él', complementó.
CUMPLIRÁN UN SUEÑO
Esta familia cachaca, que tiene un amor grande y añejo por Junior, cumplirá uno de sus más grandes sueños. Su historia, gracias a las redes sociales, se ha hecho viral y le llegó a Christian Daes, CEO de la empresa Tecnoglass, quien lo invitó para el partido entre el cuadro rojiblanco y Atlético Nacional, el próximo 2 de marzo en el ‘Coloso de la Ciudadela’.
'El domingo, después del partido, cuando íbamos caminando a la casa, mucha gente me empezó a preguntar si Jefferson le había cumplido al niño. Lo más correcto es subir la foto y que la gente vea que Jefferson cumplió, que tuvo un gran gesto con mi hijo y subí la foto. Mucha gente me empezó a decir: ‘ve, yo los vi en el estadio, pero como así que tú, cachaco, eres hincha de Junior’. Alguien me dijo: ‘¿por qué no cuentas en una historia por qué te hiciste hincha al Junior?’. El lunes, en un momento libre y de esparcimiento, aproveché y escribí un hilo contando todo. Así empezó todo el mundo a darle me gusta, dar RT y a citar. Algunas personas etiquetaron a Christian Daes y a una joven que se llama Zule, es una chica que en Twitter (X) la gente la conoce demasiado y que sé que trabaja con Christian Daes en Tecnoglass. Nosotros no somos pretenciosos, las cosas pasan. Nunca lo hice con alguna pretensión. El martes alguien etiquetó a Christian Daes y él respondió que eso iba a ser una realidad (conocer el Metropolitano). Después de eso se contactaron conmigo', dijo Johan Pérez.
'Ellos ya nos confirmaron que íbamos con los gastos pagos. El niño está emocionado, anoche casi no lo puedo acostar a dormir. Además de ir a Barranquilla y conocer el estadio, también quiere ver la Ventana de Campeones y el mar. Está sumamente emocionado, es la primera vez que va a tener la posibilidad de viajar en avión. Todo ese tipo de cosas lo tiene muy contento. La experiencia ha sido única', agregó.
