Por la presencia de un helicóptero de la Gobernación de Antioquia que habría transportado a los paramilitares para perpetrar la masacre del corregimiento de El Aro, en Ituango, Antioquia, el Tribunal de Justicia Transicional de Medellín pidió que se investigue al ex gobernador y hoy senador, Álvaro Uribe Vélez, en medio de la condena proferida contra el ex jefe paramilitar Ramiro ‘Cuco’ Vanoy.
En la masacre, cometida el 22 de octubre de 1997, murieron 15 campesinos, que fueron acusados por las AUC de ser supuestos guerrilleros.
El extinto integrante de las AUC Francisco Villalba aseguró en 2008 ante la Comisión de Acusaciones de la Cámara que el gobernador Uribe había ordenado la masacre. Meses después de esa declaración, Villalba fue asesinado cerca de su casa, en La Estrella, Antioquia.
Frente a la solicitud de investigación en su contra, el expresidente, desde Rionegro, aseveró: 'la magistrada María Rincón, de la cuerda de Iván Velásquez, quien ha utilizado la justicia para perseguirme, ha ordenado investigarme porque supuestamente un helicóptero de la Gobernación habría estado en la escena de la masacre de El Aro, según dice la esposa de unas de las personas asesinadas'.
Advirtió que esta denuncia ya había sido 'desvirtuada por el CTI de la Fiscalía: un testigo dijo que yo había ido a La Caucana a preparar la masacre, paraje de Antioquia que no pude visitar en un Jeep Nissan blanco y rojo, porque habría tenido que ir en avión o en helicóptero por razones de seguridad'.
Sobre los señalamientos de que Santiago Uribe, su hermano, habría llevado 20 paramilitares para perpetrar la masacre, aseguró que 'no habría tenido con qué pagar uno de ellos'.
Y concluyó que los helicópteros de la Gobernación 'son rigurosamente administrados de acuerdo con unos protocolos y unos recorridos controlados, y quienes manejan esos helicópteros autónomamente en el Servicio Seccional de Salud han explicado todo lo que les han preguntado y han desvirtuado esta imputación'.
La condena. La Sala de Conocimiento de Justicia Transicional del Tribunal Superior de Medellín sentenció a ocho años de prisión, la pena alternativa de Justicia y Paz a Cuco Vanoy, por más de 5.540 hechos delictivos cometidos entre 1985 y 2006 en Antioquia y Córdoba.
'Entre los hechos confesados y aceptados por el ex cabecilla paramilitar figuran ocho masacres perpetradas en Medellín y otros municipios antioqueños como Ituango, Tarazá, Peque, Briceño y Valdivia, en las que fueron asesinadas 59 personas señaladas como colaboradoras de la guerrilla', indicó la Fiscalía.
Así mismo, figura el reclutamiento forzado de 365 menores de edad, quienes fueron entregados al Icbf el 20 de enero de 2006, fecha en la que se desmovilizó la señalada estructura paramilitar.
Explicó la Fiscalía que 'Vanoy fue sentenciado además por homicidio en persona protegida, secuestro simple, tortura, desplazamiento forzado de personas y porte ilegal de armas de fuego de uso civil y militar, entre otras conductas delictivas'.
En el fallo de primera instancia, se ordenó además que se compulsen copias con fines de extinción del derecho de dominio de 52 fincas ubicadas en el norte de Antioquia y en el sur de Córdoba, así como de una clínica en Tarazá, donde eran atendidos los combatientes enfermos o heridos en enfrentamientos.
Se ordenó también investigar penal y disciplinariamente a varios oficiales y suboficiales de la Cuarta Brigada del Ejército y del Comando de Policía Antioquia, por su colaboración con las Autodefensas.
Vanoy, excomandante del Bloque Mineros de Tarazá, Antioquia, se desmovilizó en 2006 y fue extraditado en mayo de 2008 a EEUU, donde purga una pena de 24 años por narcotráfico.