La Guardia Civil detuvo este jueves a 11 integrantes de la banda latina Dominican Don't Play (DDP) asentados en las ciudades de Madrid y Toledo, tres de ellos como presuntos autores materiales del asesinato de un joven de origen colombiano de 25 años el pasado sábado en la capital española.
Los tres detenidos por el crimen del joven colombiano ingresaron poco después en prisión por orden judicial.
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La operación sirvió para desarticular el Coro (nombre por el que se conoce a los grupos de DDP asentados territorialmente) de la localidad de Seseña, en Toledo, que tenía vínculos con el de Madrid, informaron fuentes de ese cuerpo armado.
El pasado martes un juez ordenó prisión provisional para otros dos detenidos, un español de 20 años de origen sudamericano y un ecuatoriano de 27, por el presunto homicidio del colombiano, posiblemente en una reyerta entre miembros de los Dominican Don't Play (DPP) y los Trinitarios.
Un menor de 15 años también fue asesinado con arma blanca en el pecho el pasado fin de semana tras, al parecer, otra reyerta entre las mismas bandas latinas en el centro de Madrid.
