Propiciar espacios de formación desde una educación popular ligada al autoconocimiento femenino es uno de los mejores baluartes que han dejado huella en la vida de Fallon Yamilet Hernández (Fallon DeLoto), una Internacionalista con experiencia de más de 9 años con población étnica que a través de la pedagogía busca romper estigmas en la sociedad.
Todo lo que envuelve el cuerpo de la mujer se ha caracterizado por ser desde hace siglos un tema tabú que en la actualidad aún persiste, pese a que se han logrado avances, el rezago sigue latente. Y es que el silencio es algo que ha marcado la sexualidad femenina, siendo esta una de las razones para el visible desconocimiento de la fisiología sexual por parte de la mujer.
Es por ello que Fallon decidió sembrar nuevas semillas capaces de cosechar una transformación entorno a esta coyuntura. Es así como nace ‘VulvArte’, la primera escuela en Colombia y América Latina de Educación Sexual y Menstrual Popular que se enfoca en el autoconocimiento de la vulva y en el placer sexual e integral para la eliminar las violencias simbólicas y físicas que viven las vulvas, principalmente las Mutilaciones Genitales Femeninas por motivos étnicos y médicos.
Paralelamente, también es una exposición de vulvas creadas desde las artes plásticas: un centro de investigación sobre Sexualidad Integral; y un centro creativo de productos editoriales, pedagógicos, artísticos y audiovisuales.
Fallon ha trabajado con mujeres indígenas, de Chocó, Amazonas, Risaralda, Sierra Nevada de Santa Marta, Caldas, La Guajira, Caquetá, Valle del Cauca, Nariño y Putumayo. Durante ese periodo se desempeñó como profesora, investigadora, facilitadora y coordinadora de proyectos de la Escuela Intercultural de Diplomacia Indígena de la Universidad del Rosario; referente de participación de la Alcaldía Local de Antonio Nariño.
Además es consultora del Fondo de Población de Naciones Unidas (UNFPA) y desde el 2018 es la coordinadora y la directora de VulvArte. Adicionalmente, cursó el diplomado en Medicina Ayurveda de la Universidad del Rosario y el diplomado en Cuerpos, Erotismos y Sexualidad del Centro Qanil de Guatemala.
Este proyecto empezó a gestarse cuando en el 2014 Fallon realizó su tesis de grado sobre la Mutilación Genital Femenina junto a las mujeres Emberá Chamí de Mistrató, Risaralda. Este hecho y su profundo interés sobre la sexualidad de las mujeres, transformaron su vida e hizo que iniciara un proceso propio, en diálogo con las demás sobre el autoconocimiento de la vulva, el erotismo y el placer. Es por ello que ‘VulvArte’ tiene sus raíces en la eliminación de ese procedimiento que experimentan las mujeres Emberá Chamí, de Pueblos Indígenas y de otras poblaciones del país.
Según El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), todos los años, cerca de 4 millones de niñas en todo el mundo corren el riesgo de ser víctimas de la mutilación genital femenina (MGF), y la mayoría son sometidas a esta práctica antes de cumplir 15 años.
Esta práctica constituye una violación de los derechos humanos fundamentales de las niñas y las mujeres y se realiza con el objetivo de alterar o lesionar sus órganos genitales sin que existan razones médicas que lo justifiquen. Casi siempre implica la extirpación parcial o total de los genitales externos.
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'El portal de la vida'
Fallon también debía florecer su conocimiento y llenarse de sabiduría femenina para llevar a cabo un proyecto que se ha convertido en uno de sus mejores tesoros. En su infancia nunca pudo llamar a sus órganos como lo que son, sino que les atribuía aquellas representaciones sociales que aún siguen vigentes.
'El hecho de que nombrar a la vulva sea algo prohibido o que se asuma como un lugar sucio, es compartido por muchas culturas, incluyendo la hegemónica que es en la que estamos. La vulva es el portal de vida para mí porque todos nacemos por allí'.
Para ella representa un reto hablar de educación sexual en el país, dificultad que persiste si se trata de conversar con comunidades indígenas
'Incluso en medio de la academia es difícil y mucho más cuando tienes que hablar de la vulva o el placer en los pueblos indígenas. Pero me doy cuenta que la manera de transformar la Mutilación Genital Femenina es la educación sexual a partir de la vulva y también con el erotismo, que tiene que ver con placer no solo sexual, sino con la vida misma y las experiencias de la vida'.
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Un arte con sentido
En ‘Vulvarte’ la metodología se basa en sembrar nuevas semillas, florecer y cosechar a través de la educación popular, colaborativa, libertaria e intercultural, que se realiza en diálogos de sentí-experiencias y en prácticas corporales, sensoriales, terapéuticas y artísticas, desde el autoconocimiento, la autogestión, la autoexploración y el autocuidado.
'Hay experiencias corporales y artísticas que nos llevan a una educación muy diferente. Nosotras nos vamos más a las profundidades porque hay mucho desconocimiento. Queremos que la sexualidad no sea asumida desde el miedo, los tabúes, los mitos, las vergüenzas, la culpa, y el desconocimiento. Además de la hipersexualización y la cosificación de los cuerpos de las mujeres, así como la menstruación asumida desde el asco, el estigma, y el tabú'.
Y es que la mutilación genital femenina se practica en muchas comunidades debido a la creencia de que garantiza el futuro matrimonio de las niñas y el honor de las familias. Algunas personas la asocian con creencias religiosas, aunque no existen textos religiosos que obliguen a practicarla.
'Ahí empiezan todas las cargas y una construcción social de lo que es una mujer y vive, cómo debe ser una mujer, como por ejemplo el hecho de llegar virgen al matrimonio. Es importante tener en cuenta que la sexualidad va mucho más allá del coito, y que tiene que ver con la menstruación, el parto, amamantar, orientación sexual e identidad de género'.
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Fortalecer la educación sexual
Sembrar la conciencia y la necesidad de impartir educación sexual en la sociedad también representa uno de sus desafíos.
De esta manera busca formar mujeres, hombres y diversidades informadas sobre sus sexualidades desde el autoconocimiento, autocuidado, autogestión y autoexploración, en temas como: género, ciclo menstrual ovulatorio, parto, ginecología natural, eyaculación consciente, consentimiento sexual real: relaciones deseadas placer por placer, anticoncepción, salud sexual y reproductiva, autoplacer, entre otros.
'Muchas personas aún tienen algún miedo o limitante para poder acceder a esta información y eso me parece muy tenaz. Además, sigue existiendo mucha censura hacia el cuerpo de las mujeres, hacia la desnudez, hacia la menstruación, hacia el hecho de hablar placer. Hay mucha tergiversación cuando una aborda estos temas', sostuvo.
