'Una cucaracha era más grande que yo', es lo que recuerda Sandra Escolar Gómez sobre cómo la hacía sentir su esposo, hace cinco años. En este entonces Escolar se encontraba en los primeros meses de su primer embarazo y no tenía tan claro que los insultos y humillaciones verbales también eran una forma de violencia de género.
La Organización de Naciones Unidas (ONU) asegura que la violencia contra la mujer sigue siendo una pandemia global y precisa que hasta un 70% de las mujeres han sido víctimas de violencia en su vida. Otro de los datos desgarradores que arroja la Organización es que cada 10 minutos una mujer es asesinada por su pareja actual o expareja.
Al respecto, la Organización Mundial de la Salud (OMS) considera que este problema es global y no solo se constituye en una grave vulneración de los derechos humanos, 'sino que también supone un importante problema de salud pública'. En ese contexto, estima que 'un 38% de los asesinatos de mujeres que se producen en el mundo son cometidos por su pareja'.
'Me culpaba y ofendía por todo, criticaba mi forma de vestir, mi cabello, mi trabajo. Así empezó esta tortura', cuenta la mujer de 35 años, quien hoy sostiene un cartel para pedir por la eliminación de la violencia contra la mujer, de la que ella fue víctima, como lo han sido casi 4.000 en Barranquilla (según datos de Comisarías de Familias), aproximadamente 1.500 mujeres en el Atlántico en 2015 y más de 37.000 en Colombia, de acuerdo con cifras entregadas por Medicina Legal.
'Un día simplemente llegó enfurecido a la casa de la madrina del niño, quien tenía seis meses de nacido y me pegó allí, sin importar nada. Fue la primera levantada de mano y la última porque denuncié', recuerda Escolar, quien hoy dice sentirse una ama de casa empoderada.
A eso son convocadas las mujeres, sus amigos, y seres cercanos durante el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, que se celebra cada 25 de noviembre como mecanismo para sensibilizar a la opinión pública sobre lo que consideran una fragrante violación a los derechos humanos.
'Si bien es cierto la violencia física es la más común, también debemos cuidarnos de la psicológica, económica, patrimonial y sexual. Es importante medir en qué nivel se encuentran nuestras relaciones porque a partir de eso podemos tomar decisiones. Las actitudes que marca el violentrómetro pueden ser el inicio del feminicidio', advierte Helda Marino, directora del programa Mujeres y Equidad de Género, adscritos a la Secretaria de Gestión Social del Distrito.
Fiorella Echeverría, coordinadora psicosocial de la campaña, explicó que el primer paso a dar en una asesoría a una mujer víctima de violencia es lograr que se reconozcan como sujeto que tiene derechos.
'La idea es que al finalizar el proceso, ellas salgan con otra perspectiva para afrontar de manera distinta la situación que afrontan. Que sepan que bajo ninguna circunstancia de ser aceptada la violencia', expresó en declaraciones a EL HERALDO.
En el departamento del Atlántico han sido asesinadas 37 mujeres en lo corrido de este 2016, según cifras presentadas por la Gobernación. De esos casos, siete obedecen a feminicidios, lo que significa un 19% de los hechos reportados.