'¡Se fue, se fue mi hijo, ay Jose, qué dolor, mi hijito, qué dolor, ¿por qué te hicieron esto?', repetía Rita Villeros, la madre del joven productor audiovisual asesinado este fin de semana en Barranquilla, mientras era conducida al mecedor donde todas las noches esperaba la llegada de su hijo.
Invocaba con desespero el nombre, desde su residencia en el barrio El Silencio, como queriendo llenar el vacío que le dejó su intempestiva muerte, registrada a las 10:30 de la noche del domingo en la calle 68C con carera 31, del barrio Olaya.
José David Montoya Villeros al parecer se opuso a que delincuentes le robaran sus celulares y fue atacado a tiros.
Su padre, el abogado Omar Montoya, un hombre de 59 años que dice haber vivido uno de los días más felices de su vida el 2 de enero de 1991 cuando llegó al mundo su hijo, no se explica cómo a una persona llena de sueños, de vida y de ganas de salir adelante le quitan la vida por un teléfono.
Aún no sale del impacto que le produjo ver a José David debatiéndose entre la vida y la muerte tirado boca abajo en la mitad de la calle mientras llegaba el auxilio médico, por ello pidió ayer, entre lágrimas, en las afueras de Medicina Legal, que el hecho no quede impune.
Ante el crimen, la Policía Metropolitana anunció el ofrecimiento de una recompensa de hasta 20 millones de pesos por información sobre los autores.
Montoya Villeros se había graduado hacía dos años del programa de Dirección y Producción de Radio y Televisión de la Universidad Autónoma del Caribe, laboraba en la oficina de comunicaciones del Sena Regional y, con su propia empresa de producción, ofrecía servicios de fotografía y producción en eventos sociales.
Lo que pasó
La noche del crimen, el productor audiovisual acaba de terminar una comida breve con dos amigas en un establecimiento en Olaya. Los tres emprendieron el regreso a la casa de una de las jóvenes cuando, a mitad de cuadra, fueron interceptados por un taxi tipo ‘zapatico’ del que descendió uno de los 4 ocupantes y los encañonó con un arma de fuego.
De acuerdo con testigos, en medio del nerviosismo el joven intentó zafarse de los criminales, lo que ocasionó la reacción del asesino que, a sangre fría y por la espalda, le encajó un tiro mortal en la espalda baja, cerca de la cadera.
Ayer el rastro escarlata de su sangre aún estaba en el lugar donde su cuerpo quedó tendido.
'Por aquí mucha gente a esa hora ya estaba recogida. Se sintió fue el disparo y todos los vecinos salieron a auxiliarlo. Decía que tenía ganas de vomitar. Le aplicamos alcohol pero nadie se atrevía a moverlo y ya se habían hecho las llamadas a la Policía y la ambulancia, pero siempre demoraron entre 15 a 20 minutos', indicó un residente en el sector.
Los delincuentes abandonaron la escena del crimen a toda velocidad a bordo del vehículo. Algunos vecinos hablaron de una ola de inseguridad descontrolada, de atracos consecutivos.
Minutos después al sitio llegó el padre del joven quien, desesperado, imploraba porque no lo dejaran morir .
'Le hablaba, pedía ayuda, decía que volvieran a llamar la ambulancia. La verdad es que esto es muy triste... por acá la seguridad está en nada', contó otro de los preocupados residentes del sector.
Una hermana, Liseth Montoya, recordó que José David salió el domingo a las 8 de la noche en su moto para encontrarse con sus amigas. 'Soñaba con la producción de videos, de documentales, siempre fue un pelao de la casa, muy apegado a la familia, a mi mamá. A mi hermano le gustaba el deporte, el gimnasio, no fumaba, no bebía y tenía ya sus equipos de producción con los que buscaba consolidar su empresa. Mi hermanito, ¿por qué me dejaste sola?', se preguntó desconsolada.
Analizan videos
El brigadier general Ramiro Castrillón, comandante de la Policía Metropolitana, indicó que los investigadores del caso analizan videos de cámaras de seguridad que se encuentran en el sector para tratar de establecer la identidad de quienes participaron en el homicidio.
Los miembros de Policía Judicial también están haciendo un seguimiento 'pormenorizado del lugar' con el fin de poder establecer imágenes del vehículo para individualizar las placas.
El oficial recalcó que la semana pasada la Policía entregó cerca de 1000 celulares a personas que habían sido víctimas de hurto. 'Llevamos 7 organizaciones delincuenciales dedicadas al hurto de celulares desmanteladas en el año', anotó.
Añadió que hubo un incremento de 104 riñas con respecto al año pasado este fin de semana. En 2014 se presentaron 420 y este 2015 hubo 524. Se incautaron 9 armas de fuego y fueron conducidas a la UPJ de forma preventiva, 280 personas.
Sena confía en la captura
La seccional Atlántico del Servicio Nacional de Aprendizaje, Sena, se pronunció sobre el asesinato de José David Montoya, quien se desempeñaba como realizador audiovisual y fotógrafo en su oficina de comunicaciones. En comunicado de prensa señaló que el joven es recordado por sus compañeros de trabajo como una persona trabajadora, carismática, profesional y comprometida. 'La Dirección Regional del Sena confía en que las acciones de las autoridades conduzcan al paradero y detención de los responsables de este lamentable hecho, que enluta a la entidad y deja un vacío en la memoria y el ánimo de quienes lo conocieron', expuso.
Nueve homicidios entre viernes y domingo en fin de semana violento
Entre la noche del viernes y la noche del domingo se registraron nueve homicidios en Barranquilla. La situación fue cuestionada nuevamente por la alcaldesa distrital, Elsa Noguera De La Espriella, quien llamó la atención de la Policía Nacional para reforzar la seccional metropolitana.
El primer caso se presentó a las 8:30 p.m. del viernes en el barrio Cevillar. Sicarios segaron la vida de Yesid Herazo, de 27 años, mientras conducía una motocicleta. La segunda se presentó a las 10:20 p.m. en la calle 7 con carrera 7, barrio El Ferry; allí fue asesinado de 4 tiros Kevin Herrera, de 19 años, alias Tubará. Minutos después, fue muerto a tiros Yurgen Arévalo, de 39 años, en la calle 10 con carrera 41, en el Mercado de Barranquilla. El sábado a las 9:40 de la mañana, en el barrio Villa Rosario, fue asesinado un reciclador conocido en el sector como ‘el Flaco’, en inmediaciones de un basurero localizado en la calle 83 con carrera 38. A las once de la mañana del mismo día fue asesinado Tilson Morales Barrios, de 39 años, conocido como ‘el Ancho’. El hecho ocurrió en la carrera 3B con calle 52B del barrio Las Américas. En horas de la tarde del mismo sábado fue asesinado de una puñalada en el pecho Kevin Ramírez, de 17 años, en el momento en que caminaba por la calle 21 con carrera 34 del barrio Rebolo.
En el barrio Sourdis fue asesinado a bala Andrés Carvajal, de 21 años. El hecho ocurrió a la 1:30 de la madrugada del domingo. Con Carvajal ya va en 7 la cuenta de muertes por homicidio. El taxista Hener Orozco, de 48 años, fue asesinado de un disparo en la cabeza a las 9 de la noche de este domingo en el barrio Nueva Colombia. El último asesinato que cerró este fin de semana violento, el que la misma alcaldesa calificó como inaceptable, fue el homicidio del realizador audiovisual José David Montoya, la noche del domingo, en el barrio Olaya.
