
“Ni los billetes ni los insultos juegan”: Macnelly Torres
El ‘10’ barranquillero afirmó que no se dejó absorber por la presión de la afición rojiblanca.
Macnelly Torres jugó el pasado miércoles en su casa, en el estadio que lo vio debutar como profesional y ante la afición que hasta hace poco lo respetaba y lo veía como uno de los referentes del Junior, pero, a pesar de todo esto, el ‘10’ barranquillero se sintió como un visitante más, incluso peor, porque fue tratado de “mercenario”, “vendido”, “traicionero” y “Judas”.
Todo esto pudo afectarle en su juego, aunque él asegura que no se dejó absorber por la presión. Lo cierto es que el creativo jugó uno de sus partidos más discretos en el ‘Metro’, y Nacional lo sintió.
Al final Macnelly se fue con las manos vacías, con la eliminación el bolsillo y con la sensación de que ya no es profeta en su tierra.
¿Qué análisis hace del juego?
Fue un partido muy difícil, el cual teníamos controlado hasta el gol de tiro libre. Creo que de ahí en adelante el Junior mejoró y luego nos hace el 2-0 que nos deja por fuera de esta serie. Tuvimos la oportunidad de irnos en ventaja, incluso luego de igualar el partido, pero fallamos en el último paso. Junior hizo todos los méritos para ganar, y pasaron bien.
¿En qué cree que falló Nacional?
Fallamos que en el segundo tiempo les dimos un poco de espacio a ellos y le entregamos la pelota, y por ahí se tomaron un poco de confianza. El primer tiempo creo que en gran parte lo controlamos nosotros, incluso tuvimos para ampliar el marcador. Pero bueno, debemos seguir, sabíamos que esta Copa era importante para nosotros, pero quedamos tranquilos porque lo entregamos todo. Al final nos gana un buen equipo.
¿Cómo vivió el ambiente que lo rodeó durante el juego?
Yo vengo es a jugar un partido de fútbol, yo no vengo a pelear, ni a prestarle atención a lo que el hincha puede sentir en la tribuna. Creo que me voy muy contento con el rendimiento que ayer tuve, para mí hice un buen partido. Lo demás es externo, ni los billetes, ni lo cánticos, ni los insultos juegan. Lo que pasó es normal, lo entiendo y me lo esperaba. Tengo suficiente experiencia como para saber manejar este tipo de situaciones.
¿Le produjo algún sentimiento el haber vivido todo este ambiente en su contra, jugando en la ciudad que lo vio nacer y debutar en el fútbol?
La verdad, no. Yo me siento normal. Hoy defiendo la camiseta de Atlético Nacional y me toca defenderla a muerte. Me voy tranquilo porque creo que al final se vivió un gran partido, en donde pasó el que mejor hizo las cosas.