Harold Ramírez tuvo su debut el pasado lunes con los Indios de Cleveland en la victoria 8-6 sobre los Reales de Kansas City y el jardinero colombiano demostró por qué merece estar en las Grandes Ligas.
‘El Pitbull’, en su primer juego con la organización de Ohio, se fue de 5-2, con un sencillo y un doble, y anotó una de las ocho carreras de su equipo en el triunfo como visitantes.
Además, Ramírez proporcionó al roster de Cleveland un madero y un guante sólido en los jardines. Los Indios han sufrido con el nivel ofensivo de sus patrulleros a lo largo de las dos últimas temporadas y la llegada del cartagenero podría significar un puesto seguro para el lineup de Terry Francona.
El jardinero, que bateó como sexto en el orden, jugó primero en el jardín central y luego tomó lugar en el prado izquierdo para completar el juego.
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Este debut para Ramírez representó un nuevo comienzo luego de debutar en Grandes Ligas con los Marlins de Miami, que lo dejaron libre antes de esta temporada para abrirle cupo al lanzador John Curtiss.
El bolivarense conectó el doblete en el primer turno al bate que tuvo ante los envíos de Daniel Lynch. El toletero sacudió, al primer pitcheo, una recta en el medio del plato para su primer hit del año.
En el séptimo episodio, el colombiano se apuntó un sencillo y luego anotó tras el cuadrangular de Josh Naylor.
Como curiosidad, Ramírez, conocido por su buen contacto con el bate, fue el pelotero que registró, en la jornada del lunes, las dos pelotas bateadas con mayor velocidad de salida en las Grandes Ligas: 114.5 y 113.5 millas por hora respectivamente.
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