Las huellas de un sueco de padres libaneses quedaron estampadas en el cemento azul de la cancha principal del Parque Distrital de Raquetas. Kevin Chahoud se engrandeció en Barranquilla y conquistó el título del Mundial Juvenil de Tenis en la rama masculina. El joven de 17 años derrotó en la final al estadounidense Jacob Bullard por 6-3, 6-4, en un juego que tuvo una duración de una hora y 40 minutos.
Chahoud marcó diferencia de entrada. El primer set lo dominó a su antojo y tomó ventaja de cinco juegos a cero. Bullard, que venía de eliminar al brasileño Matheus Pucinelli, siembra uno del torneo, apretó un poco su juego y logró llevar el duelo a 5-3, pero Chahoud volvió a encontrar su ritmo y liquidó el set.
En el segundo set Chahoud volvió a mostrar toda su calidad y pasó derecho imponiéndose 6-4.
El sueco se llevó todo los aplausos gracias a la calidad del tenis que mostró en el terreno de juego.
'Fui paciente pero también agresivo. Mi sueño de niño siempre fue jugar los Grand Slam y ahora con este título voy a subir al ranking 40 y ya podré estar en Wimbledon, Abierto de Australia y Roland Garros', dijo al final del partido el admirador del español Rafael Nadal.
Dave Bandelin, entrenador de Kevin, le dio crédito a la esfuerzo y contundencia que mostró su pupilo en los momentos claves del partido.
Bandelin considera que Chahoud va por buen camino en el tenis que si continúa por ese camino será un gran tenista profesional.
'Cuando Kevin estaba perdiendo fue pasivo, pero cuando iba ganando fue agresivo y así hay que jugar este tipo de torneos. Las piernas de Kevin son su principal fortaleza, puede correr como un conejo, nunca se cansa, su físico es perfecto y por eso es que está ganando. Puede correr y correr', apuntó el entrenador europeo.
Kevin Chahoud no habla el español, pero se atrevió a intentarlo y le dejó esta frase a todos los barranquilleros: 'En Barranquilla me quedo', dijo mientras sonreía.
























