El febrero pasado William Cuevas tuvo la oportunidad de poder caminar por las calles del populoso barrio de La Esperanza en Cartagena y conocer, por fin, a la otra mitad de su familia política colombiana. No había estado en nuestro país.
Un poco más de un mes después, el derecho, hoy convertido en el pelotero número 18 en llegar a las Grandes Ligas con origen colombiano, se enfundó la camiseta azul de Colombia enfrentando a España, blanquearlos y de esta forma comenzar el camino de la conquista del único cupo al IV Clásico Mundial de Béisbol del 2017.
Pero ¿por qué un deportista de 25 años, nacido en Caracas, hecho en el vecino país, firmado por el béisbol organizado en Venezuela, que juega en liga invernal con los Tiburones de La Guaira, decidió ponerse en el pecho las ocho letras de un país que no conocía hace dos meses atrás?
'Por puro orgullo natal. Es más, conocí a Cartagena en menos tiempo de edad que el que lleva mi mamá (Alcira Margarita Osorio de Cuevas) radicada en Venezuela sin regresar a Cartagena', comentó el derecho de 6 pies y 2 pulgadas de estatura (1.88 metros).
El jugador es conocido de quien ofició como entrenador de lanzadores de la Selección Colombia en Panamá, el cartagenero Walter Miranda, que lo contactó ofreciéndole la oportunidad de ponerse al frente del trabuco tricolor nada más y nada menos que en lugar de Julio Teherán, ausente de la competencia por no recibir el aval de los Bravos de Atlanta.
'(Walter) me conoce desde que estoy chamaquito, ha seguido mi trayectoria. Fue mi entrenador cuando estaba en 'rookie league' en 2011. Él me habló de esta oportunidad y teniendo en cuenta que cumplo con los requisitos para representar al país, lo hice. Le comenté a los jefes en Boston, estuvieron de acuerdo y fui a Panamá. Muy orgulloso de poder ayudar al país de mi mamá y con eso me basta y me sobra para sentirme uno más de la Selección', le dijo a EL HERALDO en el lobby de la Torre Trump el colombo venezolano el pasado 16 de marzo antes del juego del debut en el Rod Carew de la capital panameña.
William recibió el permiso para dejar los campos de entrenamiento en Fort Myers (Florida, EE.UU.) para unirse a Colombia, lanzar, pidió que lo dejaran hasta el final de la eliminatoria para acompañar al equipo hasta el domingo 20 de marzo, día en el que la novena nacional derrotó a Panamá, 2-1 y concretar el momento histórico de la pelota caliente.
'Fui firmado por Boston en Caracas, por un cazatalentos que vio mis condiciones, mandó el video a Estados Unidos, me firmaron en el 2008, pero solo pude arrancar con ellos en el 2009. He jugado con los Tiburones de la Guaira en la liga venezolana', dijo.
Venezuela fue un quinto país e hipotético participante en el pasado clásico en su fase de clasificación en Ciudad de Panamá el mes pasado, dada la gran presencia de los nacionales del vecino país que se enfundaron las camisetas de España (14 jugadores) y Colombia. A Cuevas le tocó enfrentar, incluso, a varios compañeros en la novena de La Guaira.
Como serpentinero su repertorio pasa por la recta, de dos y cuatro costuras, el 'slider' y el cambio de velocidad.
No ha recibido ofertas para jugar en la pelota invernal de nuestro país y su gran desempeño en la pretemporada con Boston le valió el llamado para reforzar el cuerpo de lanzadores de la novena que dirige John Farrell. Aunque su estadía no será superior a 15 días.
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