En Colombia hay 63 Facultades de Medicina (sin contar los egresados que vienen de Venezuela, Cuba y países vecinos). De estas 18 son oficiales y 45 privadas. Hay 34 programas de medicina acreditados. En 2018 se graduaron 6.429 médicos de las facultades de medicina de Colombia, cifra que equivale a 13,3 nuevos médicos graduados por cada 100 mil habitantes, indicador que está por encima del promedio de 12,1 que registró ese mismo indicador para los países de la Organización para la Cooperación y Desarrollo (OCDE) en el año 2015. Estimamos que hay 1.5 de médicos generales por cada 1.000 habitantes (Min Educación) y nos vamos acercando a la meta que la OMS colocó para el Talento Humano en Salud en 2030.

Para la cantidad de médicos que se gradúan no existe las suficientes plazas para cumplir con el Servicio Social Obligatorio. En este orden se les exonera de esta responsabilidad y se entrega la tarjeta profesional. En la última convocatoria para rural fueron exonerados 1.303 médicos por falta de plazas. Estos colegas ingresan al grupo de sub o desempleados del talento humano en salud. Y la oferta sigue, la imparable producción anual que envían las escuelas de medicina no se detiene.

En la Región Norte hay 14 programas de Medicina, todos los departamentos, menos la Guajira, tiene una facultad. Estimamos una población de 11.5 millones de habitantes y contamos con el 22% de los programas de medicina del país. La oferta en nuestra región está saturada. ¿En qué momento se disparó la oferta de las escuelas médicas? Entre 1990 y 2009 nacieron 37 programas de medicina (¿Ley 30 de 1992?). La Educación Medica debe ser interdependiente con las necesidades de la sociedad. (Consenso de Montería,2017). La salud es un derecho fundamental y la calidad en la formación un imperativo de las escuelas médicas. Su logro responde a un juicioso proceso de planeación, ¡la improvisación no vale!

Elocuente la encuesta realizada por el CMC (26 de febrero 2019) en donde 3 de cada 4 han visto afectada su situación laboral. Si tocamos el salario,70% promedio, respondió que han tenido problemas con el pago oportuno de sus salarios. La depresión es mayor en los médicos y la inmensa mayoría no quiere que sus hijos estudien medicina. Subempleo y desempleo medico: una preocupante realidad. El retorno para un país en formar un médico en escuela pública (165 millones) son 17 años. En la privada hasta 34 años (245 millones). Con este clima ocupacional estos indicadores se quedan cortos.

No es “soplar y hacer botellas” la creación de un programa de medicina. Sin hospital universitario tiene enorme delgadez académica. Hay que seleccionar los escenarios de prácticas. “Pacientes compartidos” no es la solución para que en modalidad de arriendos hospitalarios vayan a practicar diversas facultades. Es necesaria impulsar la carrera docente. El de la habilidad y técnica quirúrgica impecable no es el mejor educador médico. El médico debe aprender a enseñar, atenta contra la calidad de la formación la espontaneidad de docentes. La educación continuada, los créditos y la actualización son elementos que deben impactar en la productividad y por supuesto en la escala salarial.