Nada más hay once hombres capaces de evitar lo inevitable. Once hombres preparados para cambiar el destino. Hacer vivir una noche negra al todopoderoso conjunto blanco. Hombres jóvenes tocados por una varita mágica. Hombres duros bregados en mil batallas, que beben el elixir de la juventud eterna. En Europa nada más hay once hombres capaces de cambiar la historia”.
Este texto pertenece a TV3, la televisión autonómica de Catalunya, sobre la final de la ‘Champions’, que se disputará mañana en Cardiff, entre el Real Madrid y la Juventus. La propaganda de la retransmisión en directo está sazonada con imágenes de jugadores eufóricos de la ‘Juve’ y escenas de futbolistas frustrados del Madrid.
En un mundo patriótico se supone que toda Italia, incluso los aficionados del Milan y Torino, irán con la Juve, y que todos los de España, incluso los del Barsa y Atlético quieren ver ganar al Madrid. Pero en el país de la piel de toro las cosas no son tan lógicas. La gran mayoría del Atlético quieren ver perder a su vecino rival y no hay un solo socio del Barcelona que quiera ver al Madrid levantar su duodécimo título europeo.
El anuncio de TV3, como era de esperar, ha exacerbado al público madrileño. Ha sido calificado de haber sido realizado por los tiffosis dado que apuesta claramente a favor de los italianos. Quizás ningún canal italiano realizaría una apuesta tan partidista como la del canal catalán.
Pero entre Barcelona y Madrid hay una guerra que traspasa el mundo del fútbol, y que se ha acrecentado con las intenciones de los catalanes de pedir la independencia de su país.
Para los del Barsa un nuevo triunfo del Madrid en la ‘Champions’, el segundo consecutivo, significaría una nueva herida que se añadiría a la ya efectiva en el campeonato español. Un éxito tan importante supondría volver a ver imágenes de celebración de los aficionados blancos en la Plaza Cibeles, al mismo tiempo que los jugadores lanzarían dardos envenenados hacia Catalunya, el Barsa y especialmente hacia Gerard Piqué y Shakira.
Por tal razón, porque todo lo que es bueno para el Madrid es malo para el Barcelona, y viceversa, mañana la gente del Barsa se convertirá en tiffosi, y debajo de la camiseta azulgrana llevará una blanquinegra, amanecerá hablando italiano, hará un brindis con vermut, un aperitivo procesado por primera vez en Turín; hablará bellezas de los automóviles Fiat, el mayor invento nacido en la capital del Piamonte. Y, sobre todo, dirá que por una noche estará enamorada de la Juventus.
Suerte tenemos los colombianos que gane quien gane, James o Cuadrado, siempre podremos ver una bandera tricolor en el podio. Yo, por si acaso, veré el partido almorzando unos spaguettis a la putanesca en la Vecchia Signora.
