Por fin se confirma públicamente la complicidad de la iglesia católica a través de la historia, en la pederastia y desaparición de niños durante la dictadura en la Argentina de Jorge Rafael Videla, por parte del entonces cura Jorge Mario Bergoglio hoy el papa Francisco. La película Los dos Papas, se queda corta ante los atropellos cometidos por estos bárbaros. No basta con arrepentirse. Aún hoy, las abuelas de la Plaza de Mayo tienen el dolor latente y presente. Por citar algunos casos: las hermanas Estela y Elena de La Cuadra. Benedicto XVI hoy retirado, fue cómplice del cura mejicano Marcial Maciel Degollado, pedófilo reconocido.
A Bergoglio, según el cura salteño José Luis Galli, lo acusa de cómplice de secuestro, tortura y desaparición de madres opositoras al régimen de Videla y de sus subalternos jesuitas; en su libro: La corrupción intentó llegar al cielo.
Todo reposa en el expediente 1307/18. Y ni hablar del proceso penal abierto en Francia también por complicidad del asesinato de un cura de ascendencia francesa. Francisco visitará su país en abril 2020.
¿Será bien recibido? Quienes me atacaron hace años por supuestamente "calumniar" al papa Francisco, los invito a informarse y sacar sus propias conclusiones.