Compartir:

Con profundo pesar, el gremio de vendedores del centro de Barranquilla y la comunidad del barrio 7 de Abril recibieron la noticia del fallecimiento de Joaquín Cervantes, presidente de la Asociación de Vendedores Estacionarios y Móviles (Asovendedores), ocurrido en la noche del 3 de agosto a causa de un infarto.

Lea aquí: Las alternativas de expertos al pico y placa para motos

Cervantes lideró durante más de 30 años la Asociación de vendedores informales, convirtiéndose en un referente para el gremio y un reconocido dirigente comunitario en el sur de la ciudad.

El alcalde Alejandro Char, a través de su cuenta social X expresó su pesar y destacó el trabajo que Cervantes venía realizando con los comerciantes del centro de Barranquilla.

“Hoy despedimos a Joaco Cervantes, un líder comprometido con la transformación de Barranquilla. Su entrega a los comerciantes y su lucha constante por el trabajo digno dejan una huella imborrable en nuestra ciudad. Acompañamos con cariño a sus familiares, amigos, personas cercanas y, por supuesto, al gremio de vendedores que representó con tanto orgullo. Vuela alto, papá!”, escribió Char.

El ex alcalde Jaime Pumarejo también lamentó la muerte de este líder gremial y resaltó su entrega y liderazgo. “Un abrazo solidario para toda la familia de Joaco Cervantes. Su entrega y liderazgo desde Asovendedores nos ayudó a dignificar la vida de muchos comerciantes y aportar a una Barranquilla mejor organizada. Paz en su tumba”, escribió Pumarejo en su cuenta X.

La noticia de su muerte fue confirmada en la mañana de este lunes por Gabriel Navarro, presidente ejecutivo de Asocentro, quien expresó su pesar por la pérdida de este líder que dedicó su vida a defender los derechos de los vendedores informales.

“Pese a pertenecer a gremios distintos, siempre reconocimos su labor. Fue un trabajo arduo en un cargo muy complejo. Luchó incansablemente por una reubicación digna, algo que también promovemos desde Asocentro junto con la Alcaldía, buscando condiciones óptimas y espacios adecuados para estos trabajadores”, señaló Navarro.

El dirigente también manifestó su solidaridad con los familiares, allegados y afiliados de Asovendedores: “Toda mi empatía y respeto para su familia y para quienes compartieron con él su compromiso por la dignificación del trabajo informal”.

Para Juan Ospino, Secretario de Cultura y Patrimonio de Barranquilla, ‘Joaco’ como cariñosamente lo llamaban, era un hombre trabajador comprometido con el gremio de vendedores y comerciantes del centro. “Amigo y comprometido con lo social”.

Lo recordó como una pieza clave en el proceso de recuperación de la Plaza de San Nicolás, luego de una visita a Ecuador donde conocieron de cerca la transformación de Guayaquil. En esa oportunidad, Cervantes viajó junto a otros 20 vendedores, acompañados por el entonces alcalde Alejandro Char y Juan Ospino, quien presidía el Concejo de Barranquilla en ese entonces.

“De ahí salió el acta de conciliación del desalojo de San Nicolás para recuperar ese ícono de la ciudad. De esa manera comenzó en serio el proceso de reubicación de los comerciantes del centro y la alcaldía comenzó a tener una mirada más clara sobre eso”, afirmó.

Un legado para la agremiación

Fernando Acosta, delegado de Asovendedores, recuerda a Cervantes como un hombre entregado a su trabajo que luchó incansablemente por la recuperación digna y condiciones de trabajo justas para los pequeños comerciantes informales.

“Joaquín era prácticamente el alma de la asociación. Siempre estaba pendiente de todos. Si algún vendedor tenía un problema, él era el primero en responder, en buscar soluciones, llamar a las autoridades. Defendía nuestros derechos y enfrentaba las arbitrariedades”, indicó.

Dijo que con su partida ahora más que nunca deben estar unidos todos los delegados para seguir adelante con los proyectos que él dejó encaminados.

Sus amigos, colegas y familiares informaron que el cuerpo de Joaquín Cervantes es velado en la funeraria Los Olivos de la calle Murillo con la carrera 8 A y será sepultado este martes 5 de agosto en el Cementerio Los Olivos Vía al Mar a las 4 de la tarde.