Cada año, la Iniciativa Mundial contra la Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica, denominada Gold, conmemora el 27 de marzo esta patología, con el fin de dar a conocer en el mundo los alcances, riesgos y la realidad de los pacientes que padecen de estas afecciones (ver infografía).
Para el médico Jorge Luis Quintero Barrios, neumólogo del Hospital de la Universidad del Norte y presidente del Congreso Nacional de Neumología y Cirugía de Torax, la Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (Epoc) no hace referencia exclusivamente a una enfermedad, sino a la bronquitis crónica y el enfisema pulmonar: dolencias crónicas que provocan una obstrucción en la entrada y salida del aire a los pulmones. (Ver infografía)
Según un estudio de la Prevalencia de la Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica en Colombia (Prepocol), esta es actualmente la cuarta causa de muerte en el mundo. De la misma manera, de acuerdo con cifras de la Organización Mundial de la Salud, se estima que en el 2015 murieron cerca de 3 millones de personas en el mundo, una cantidad que representa el 5% de todas las muertes registradas en ese año.
Así pues, Colombia no es ajena a esta realidad. De acuerdo con el estudio de Prepocol, estas patologías afectan a más de 900.000 personas en el país. Actualmente, el 6,2% de la población de Barranquilla padece de estas complicaciones médicas, convirtiendo a la ciudad en la cuarta con mayores casos relacionados a esta enfermedad, después de Medellín, Cali y Bogotá.
Sobre la enfermedad. Abraham Alí, director médico de la Fundación Neumológica Colombiana, afirma que la principal causa para contraer estas patologías es el consumo de cigarrillo, seguido de cocinar con leña. Laborar en industrias y la contaminación ambiental, son la tercera y cuarta causa, respectivamente.
Según la Secretaría de Salud del Atlántico, las personas que viven cerca a canteras o puertos carboníferos también tienen el riesgo de sufrir de EPOC.
De igual modo, Quintero considera que es más frecuente presenciar este tipo de enfermedades a partir de los 50 años y —agrega— 'para realizar el diagnóstico de la enfermedad es necesario hacer una prueba que se llama espirometría, la cual permite también evaluar el grado de severidad de la enfermedad. Es sencilla, ambulatoria y se encuentra incluida en el plan de beneficios en salud'.
Con el fin de mejorar la calidad de vida de un paciente con este diagnóstico, Alí asegura que la alternativa más beneficiosa son las terapias no farmacológicas, como la rehabilitación pulmonar. Dejar de fumar y prevenir las infecciones por medio de vacunación, son otras de las opciones recomendadas.