El señor recibió la certificación por el Récord Guiness.
Tras completar su hazaña y recobrar la consciencia, el hombre estuvo botando sangre por la boca y permaneció incapaz de moverse durante horas.
Sus modificaciones corporales extremas lo hicieron merecedor de un récord Guinness.
Comenzó a asistir por una broma entre amigos y además de eso tenía pases gratuitos.
El portero del New Port County batió un nuevo récord Guinness. Superó a el bosnio Asmir Begovic, que anotó en 2013 desde una distancia de 91,9 m.