Lastimosamente la Perla de América no tiene el brillo que merece, los problemas de agua y alcantarillado son ahora más notorios gracias a la naturaleza.
Lograr una reducción sostenida de las fatalidades en las vías demanda sistemas seguros y políticas públicas coherentes, en vez de medidas que no lo garantizan.
El tono desafiante de Petro en la instalación del Legislativo ratifica que la pugna entre los dos poderes estará al orden del día durante la última legislatura.
La ciudad está lista para jugar en las grandes ligas del desarrollo, pero no puede hacerlo con una infraestructura que ignora su presente y frena su futuro.
El excanciller tendrá que aclarar ante la justicia el supuesto complot, en tanto Petro debería ser más responsable al vincular a otros en su relato victimista.